9Si Francisco Camps tuviera que señalar a alguien como enemigo de sus intereses dentro de la dirección del PP, ésa sería María Dolores de Cospedal. Así lo admite su entorno, que apunta a la llamada del presidente a Génova para que le dieran el visto bueno a la celebración del Comité Electoral regional.
Una conversación que tuvo como protagonista a la vicesecretaria de Organización, Ana Mato, y no a la número dos de los populares. "Encima, no vamos a ir detrás de ella con todo lo que está haciendo", sostienen desde el Palacio de la Generalidad.
Ficción o no, lo cierto es que la secretaria general del PP es la única que se atreve a suavizar, e incluso matizar, los intensos elogios realizados por otros altos cargos, como Esteban González Pons o Javier Arenas.
Cospedal fue quien el lunes destapó la caja de los truenos al desvelar que todavía no hay fecha para la proclamación oficial; circunstancia que se mantiene en la actualidad. Y este viernes, en los micrófonos de Punto Radio, ha ido un paso más allá, dejando la puerta abierta a la posibilidad de que Camps no sea candidato.
Lo ha hecho de forma tímida, pero clarificadora: "Casi con toda probabilidad" será designado cabeza de cartel por el Comité Electoral Nacional, declaró. Un "casi" nunca antes escuchado y que remató añadiendo: "Lo normal" es que sea candidato.
Fuentes consultadas por Libertad Digital, cercanas a la secretaria general, confirman que ve "muy negro" el asunto de Camps y que, si bien considera que judicialmente "puede que no sea para tanto", políticamente las cosas las ha gestionado de una forma "cuanto menos mejorable".
Puesta de largo de Cospedal, este sábado
Dicho lo cual, desde el PP ponen el foco de atención en la puesta de largo de Cospedal, que se celebrará este sábado en Albacete. La plana mayor de la formación estará allí para arroparle: los portavoces Pío García Escudero y Soraya Sáenz de Santamaría o sus compañeros de maitines Mato y González Pons. También estará el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón.
A su lado se sentará el líder nacional, Mariano Rajoy, que se desplaza a Castilla-La Mancha como mínimo una vez a la semana. "Es lo que toca", afirmó, haciendo referencia a esos sondeos que, por primera vez en la historia, auguran una victoria de los populares en este tradicional feudo socialista.
Un apoyo cerrado que pone los dientes largos en la Comunidad Valenciana, donde ven cómo pasan los días y el presidente de los populares sigue sin aparecer. Se le espera en las Fallas, como es tradición.
Para contrarrestar el golpe de ver a Cospedal proclamada mientras que él todavía no lo está, Camps ha programado otro acto para el mismo día, aunque éste sin presencia de dirigentes nacionales. Se espera un respaldo de los suyos. "Soy muy previsible, yo no doy bandazos como Zapatero", dijo Rajoy sobre el presidente, en una conversación informal con periodistas este mismo jueves.