Así lo manifestó después de comparecer durante un cuarto de hora ante el titular del Juzgado Central de Instrucción número 6, que ha abierto unas diligencias previas después de que Suárez Trashorras declarara en la prisión en la que se encuentra cumpliendo una condena de 34.715 años de cárcel que podía dar datos sobre un ciudadano de nacionalidad española que habría participado en la confección de los artefactos.
Carmen Toro, que compareció ante el juez en calidad de testigo, aseguró no tener ningún dato que acredite las manifestaciones realizadas por su ex marido y reiteró que conoce estos hechos porque, tal y como declaró durante el juicio, asistió a dos reuniones que celebraron los integrantes de la denominada 'trama asturiana' del 11-M con la supuesta célula islamista liderada, según la versión oficial, por Jamal Ahmidan, 'El Chino'.
La primera se produjo a finales de 2003 en un McDonald's de Madrid y la segunda tras el viaje de novios de Trashorras y Toro, en febrero de 2004. En la vista, Toro confirmó su presencia en los dos encuentros aunque aseguró desconocer el contenido de las conversaciones que mantuvieron su entonces marido y 'El Chino'.
La ex mujer de Trashorras fue absuelta en octubre de 2007 por la Audiencia Nacional de los delitos de suministro de sustancias explosivas y asociación ilícita por los que la Fiscalía solicitaba una pena de cuatro y dos años de prisión, respectivamente.
Velasco, que tiene abierta una causa en la que investiga los perfiles genéticos hallados en la casa de Leganés en la que supuestamente y siempre según la versión oficial se inmoló la célula islamista y otros flecos del 11-M, incoó diligencias previas separadas a partir de la nueva declaración de Suárez Trashorras, que fue remitida por escrito a la Audiencia Nacional por el director del centro penitenciario en el que cumple condena.
Posteriormente, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado tomaron declaración al confidente Rafa Zohuier, condenado a diez años de cárcel por tenencia de explosivos y colaboración con organización terrorista, quien también aseguró desconocer la identidad de la persona aludida por Trashorras. Según las fuentes consultadas, el juez tiene previsto levantar el secreto de esta pieza en próximas fechas.
En relación con los atentados del 11-M, Velasco abrió otra pieza separada en agosto de 2009 y procesó en noviembre de ese año a siete presuntos terroristas islamistas acusados de colaborar y ayudar a huir a varios de los autores materiales de los atentados.
El ex minero fue condenado como cooperador necesario de 192 asesinatos (los 191 fallecidos en el 11-M y el GEO Francisco Javier Torronteras), 1.991 tentativas de asesinato, cinco estragos terroristas y falsedad documental. En cada uno de los delitos se le ha aplicado una reducción de pena de 5 años por la atenuante de problemas psiquiátricos.
En su sentencia, dictada en julio de 2008, el Tribunal Supremo dio por bueno que en el escenario de los atentados aparecieron, "en menor porcentaje", restos de componentes de una dinamita diferente a la Goma 2 ECO. La sentencia se empeña en que esa dinamita es la que estalló en los trenes pese a que las pruebas periciales demuestran que no fue así. La sentencia considera que ese detalle –el de la dinamita-es "indiferente" a la hora de determinar la responsabilidad penal del líder de la denominada 'trama asturiana' de suministro de explosivos, José Emilio Suárez Trashorras.