LD (Pablo Montesinos) Retrató en su última película como treinta personas tuvieron que abandonar el País Vasco para "alcanzar la felicidad" y hoy se adhiere a la iniciativa "Un exiliado, un voto" impulsada por César Velasco y la fundación DENAES. El director de cine Iñaki Arteta pide a los lectores de Libertad Digital que se imaginen lo difícil que tiene que ser para una persona abandonar su tierra por cuestiones tales como el hostigamiento de ETA o la incomprensión nacionalista.
"Es el miedo a quedarte solo en tu propia sociedad", explica Iñaki Arteta, que centra sus críticas en el nacionalismo excluyente: "Se extiende a lo social, cultural o lingüístico y afecta a todos los ambientes". Así, "la mera crítica a esas políticas es tomada como una especie de disidencia que conviene aislar e incluso señalar con el dedo".
Arteta, que en "El Infierno vasco" retrata este drama, añade que el mensaje excluyente del Gobierno de Ibarretxe "está calando en la sociedad" y esto provoca "la incomodidad de parte de la sociedad, que acaba optando por marcharse, y hace que no te sientas libre". "Es o callarte o marcharte", sentencia.
El director de cine apunta a que este éxodo ha provocado "una alteración del censo electoral" que afecta, en su mayoría, a los partidos constitucionalistas. "La prueba de algodón es que el nacionalismo no ha parado esta fuga, y no la ha parado porque no les interesa", añade. Por el contrario, "cada año hay decenas de iniciativas y ayudas para los presos de ETA".
No sabe si el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero respaldará la iniciativa pero no esconde sus dudas y recuerda "su actitud poco presentable en todo estos años". Lo bueno, añade, es que de nuevo "haya una preocupación por este colectivo tan importante" que ha sido ignorado "por todos los presidentes del gobierno".
Iñaki Arteta se suma así a la lista cada vez más abultada de personalidades del mundo de la vida política y social que empiezan a sumarse a la iniciativa de Velasco y DENAES. En declaraciones a este periódico, la ex dirigente socialista Gotzone Mora retrató como su familia es un vivo ejemplo del exilio: su marido sigue viviendo en el País Vasco, ella trabaja en Valencia y sus hijos ni tan siquiera están ya empadronados en Guecho, de dónde fue concejal.
Las víctimas del terrorismo también se han adherido a "Un exiliado, un voto". Francisco José Alcaraz asegura que no haciéndolo se estaría "rentabilizando la muerte y la persecución que lleva a cabo ETA". Santiago Abascal, Regina Otaola o Pilar Elías también han mostrado su apoyo.