Desde la dirección del PSOE estaban muy ocupados en que la doctrina oficial desde Ferraz, tras su participación en varias manifestaciones contra el Gobierno, no proyectara la imagen de que la oposición "leal" cambia el Parlamento por la calle. De ahí que el pasado lunes la Ejecutiva Federal acordara que los cargos de representación, diputados y senadores, estuvieran en sus escaños porque "el poder legislativo no puede hacer huelga". Así lo dijo este martes en rueda de prensa la portavoz parlamentaria socialista, Soraya Rodríguez, quien esgrimió que los parlamentarios "han de ser responsables y cumplir con su obligación de acudir a trabajar". Sin embargo, también dejó claro que tienen libertad de ejercer su derecho a manifestarse en las convocatorias de los sindicatos en toda España.
Algo que para los representantes territoriales para el PSOE supone, en la práctica, hacer huelga, habida cuenta de que el pleno maratoniano que celebrará este jueves el Congreso les impide llegar a tiempo a sus circunscripciones para secundar las protestas sindicales en la calle. De ahí que algunos diputados del PSOE gallego (PSdGa), madrileño (PSM) y catalán (PSC) hayan decidido, al margen de su dirección, no acudir a la sesión plenaria del jueves, según explican fuentes socialistas a Libertad Digital.
Una de ellas es la catalana Isabel López i Chamosa, la ex portavoz socialista en materia de pensiones, quien, como adelantó este diario, comunicó a la dirección del grupo que se someterá a la sanción o multa correspondiente por no acudir a la votación, pero se ausentará del pleno para acudir a la convocatoria de Barcelona por una cuestión de "coherencia", ya que Chamosa ha acudido a todas las huelgas generales, incluida la de septiembre de 2010 contra el Gobierno de Zapatero, y a ésta "con más motivo". Preguntada este miércoles por su incumplimiento de las órdenes de la dirección, Chamosa ha afirmado que "Yo respeto pero repeto también mi libertad individual. Creo que esto es una agresión brutal contra los trabajadores y hay que estar con ellos".
El PSOE ya ha advertido a sus diputados que recibirán una multa en sus asignaciones mensuales por incumplir el reglamento ausentandose de la votación y en contra de la doctrina establecida por el GPSOE.
Lo que es común entre los diputados socialistas es "el descaro" con el que el Gobierno ha preparado un pleno con el que, entienden, retan a la convocatoria sindical con la sesión "más larga de la historia": "¡Tiene hasta cinco decretos ley que se podían haber aprobado cualquier otro jueves!". Un motivo por el que algunos han preparado su particular protesta sin dejar de ser conscientes de sus obligaciones. "Yo acudiré a votar porque es mi trabajo, pero en el pleno no voy a estar. Estaré en mi despacho, salvo que sea imprescindible", dice a este diario un miembro de la Mesa.
De ahí que las formas de protesta hayan eliminado la disyuntiva entre la calle y el Parlamento. Algunos optarán por la manifestación dentro del Hemiciclo. Es el caso de Odón Elorza: "Espero que haya mañana algún gesto o alguna declaración que permita dejar clara la posición del grupo socialista contra la abominable reforma laboral del Gobierno". Algo, que según fuentes del PSOE se transformará en una auténtica ofensiva parlamentaria socialista para acercar el Congreso a los trabajadores que estarán en la calle.
Donaciones de sueldo
Los movimientos de los diputados del PSOE al margen de su dirección se producen también en relación al aspecto económico. Dado que, según publicó LD, a los diputados y senadores no se les aplica la rebaja proporcional de su sueldo por secundar la huelga por no tratarse de un sueldo sino "de una asignación constitucional", este martes se produjo un debate en la reunión del grupo socialista celebrada en el Congreso para pedir una "muestra de solidaridad": rebajarse una parte "simbólica" y cederla a los trabajadores adscritos a su grupo o a colectivos desfavorecidos. No pareció contentarles la promesa de la dirección de que "lo estudiaremos", dado que las distintas federaciones se han organizado para entregarla a distintas organizaciones. El PSC lo entregará a un ONG de ayuda a los parados de Cataluña y denuncia un diputado: "Yo quería dárselo a la UGT pero no me han dejado".
Otro que optará por formula es José María Barreda porque "si no podría dar la sensación de ser como el capitán araña que le dices a la gente que vaya a la huelga, a los trabajadores que les va a costar dinero ir a la huelga, y nuestro caso no es ese porque es legalmente imposible que nos detraigan una cantidad por ir a la huelga pero por lo menos hacer un gesto simbólico, ¿no?".
Miembros de la dirección del PSC restaron peso a las movimientos paralelos a la dirección: "no es tanto contra la dirección del PSOE como por la obligación que tenemos con nuestras circunscripciones". Lo cierto es que si hay una frase que repiten más que nunca los socialistas en los pasillos del Congreso tras las elecciones andaluzas es la siguiente: "nunca en tan poco tiempo un Gobierno ha sufrido tanto desgaste". Por ello, no se sabe si la rebelión del PSOE es contra su dirección o es la dirección quien la orquesta en la sombra contra el Gobierno de Rajoy.