El material para fabricar explosivos que portaban los detenidos fue adquirido "recientemente", según ha informado el Ministerio de Interior en un comunicado. Este material sirve para la elaboración de elementos asociados a los artefactos explosivos como, por ejemplo, la realización de moldes y la unión de piezas electrónicas.
Asimismo, las armas que portaban en el momento de la detención se trataban de revólveres sustraídos en la Fábrica de Armas de la localidad francesa de Vauvert en octubre de 2006. Entre el material incautado también se ha encontrado sikaflex, un potente sellador que se utiliza en ingeniería y arquitectura para aislar el agua.
Los tres detenidos este sábado en Francia tenían, entre sus pertenencias, resina de cristal, epoxy y circoflex, material para fabricar artefactos explosivos. Además, se han incautado seis tarjetas de identificación de Guardia Civil.
Del mismo modo, entre las pertenencias halladas tras los registros realizados por las fuerzas de seguridad se encuentran placas de matrícula falsas, DNI falsos, un documento portugués, un documento francés, un teléfono móvil sin batería y dinero en metálico.
Los detenidos, Jon Etxeberria, Iñigo Sancho y Rubén Rivero, estaban encuadrados dentro del aparato logístico de ETA, el más activo dentro de las estructuras de la banda criminal en los últimos meses de alto el fuego.
No es la primera vez que a pesar de la situación de alto al fuego general indefinido y verificable de ETA las fuerzas de seguridad francesas sorprenden a uno de sus militantes con artefactos para la fabricación de explosivos. Ya el pasado mes de junio de 2011, Iñaki Domínguez Atxalandabaso fue detenido en una estación de tren con numeroso material para la fabricación de explosivos. Procedía de Turín donde supuestamente habría adquirido este material en el mercado negro, según informaron a Europa Press fuentes de la lucha antiterrorista.