En la rueda de prensa en la que ha anunciado la fecha de las elecciones en Andalucía, el próximo 25 de marzo, José Antonio Griñán ha tenido que hablar de escándalos como la compra de cocaína con dinero de los ERE o las sospechas que pesan sobre la familia Chaves. El presidente andaluz ha optado por defenderse a sí mismo, marcando distancias con su predecesor: "Esta legislatura", ha dicho, "se recordará como el momento en que el Gobierno tomó decisiones sobre los ERE, denunciando, investigando y al mismo tiempo acusando a cualquier culpable, caiga quien caiga".
Obviando el hecho de que él firmó la concesión de parte de estas ayudas como consejero de Economía en el Gobierno de Chaves, Griñán ha presumido de que "ha sido en esta legislatura, en esta que ahora termina, donde hemos tomado la iniciativa" en el momento en que se conoció "la primera irregularidad".
"Lo llevamos a los tribunales, creamos una comisión de investigación interna, nos personamos como acusación y así seguiremos haciéndolo. Ese es el recuerdo de esta legislatura en relación con los ERE", ha zanjado el también candidato a la presidencia de la Junta.