Según el voto escrutado, el PP ha obtenido una mayoría absoluta clara, con 186 escaños, mientras que el PSOE logra sólo 110 diputados, muy por debajo de los 125 obtenidos por Joaquín Almunia en 2000. Si la cifra se confirma, sería el peor dato para los socialistas en democracia: hasta ahora, la marca la tenían las elecciones de 1977 con 118 escaños.
Alfredo Pérez Rubalcaba ha comparecido sobre las diez y media para hacer balance. Pese al panorama desolador, no ha anunciado su marcha. Sólo ha dicho que ha pedido al secretario general la convocatoria de un congreso extraordinario. Con él no ha estado ningún alto dirigente socialista. Tampoco ha comparecido Zapatero, como se rumoreó.
En cualquier caso, lo peor para el PSOE llegará a partir de este lunes: se abrirá la lucha por el liderazgo con el reto de levantar a un partido que tendrá que asumir una derrota histórica. Con un 28,67% de los votos, algo más de seis millones de sufragios, el PSOE ha perdido en estos comicios más de cinco millones de votantes y sesenta diputados.
Irrupción en el Congreso de Amaiur
En cuanto al resto de partidos, IU se sitúa como tercera fuerza política y logra con holgura grupo propio gracias a sus once escaños. CiU también obtendría un gran resultado respecto a 2008 con 16 diputados. Pero quizás lo más destacado sea el resultado de Amaiur en el País Vasco: obendría grupo propio con 7 escaños y quedaría por encima del PNV, con sólo cinco.
UPyD no lograría grupo propio pero obtendría una espectacular subida, del escaño actual hasta los cinco diputados. Coalición Canaria obtendría tres, según los datos provisionales. ERC y BNG, dos, y entran en el Congreso Compromís y Foro Ciudadano, con un escaño cada uno.