Este viernes se ha conocido que la Fiscalía del Tribunal Supremo estudiará la documentación remitida por la magistrada de Lugo, Estela San José, referente a la implicación del ministro de Fomento, José Blanco, en la 'operación Campeón'.
En los próximos días, el Ministerio Fiscal tendrá que pronunciarse sobre si cree que es el Alto Tribunal competente para investigar al socialista y si aprecia o no que José Blanco pudiera haber cometido los delitos de tráfico de influencias y cohecho que le atribuye, a priori, la magistrada San José.
Una vez que la Fiscalía se haya posicionado a favor o en contra de investigar a Blanco remitirá su dictamen a una sala de jueces de lo penal del Supremo que deberá decidir si abre un procedimiento penal contra el ministro de Fomento o, si por el contrario, archiva las diligencias. Dicha de causas especiales estará constituida por cinco magistrados. En sus manos estará la decisión de imputar al socialista o no.
En caso de que se abra un procedimiento contra Blanco, el Supremo tendría que nombrar a un magistrado instructor de la causa. En ese supuesto no sería descabellado pensar que dicho instructor llamase a declarar, si lo estima oportuno para el curso de la investigación, a José Blanco en calidad de imputado.
También cabe la posibilidad de que dicha Sala archive las diligencias remitidas por la juez de Lugo al apreciar que no existen indicios de delito en la actuación del ministro. En este caso, Blanco no sería investigado por la Justicia.
Es importante señalar que ni el fiscal ni tampoco la Sala tienen un plazo predeterminado de tiempo para emitir una posición respecto a la implicación del ministro en el caso Campeón. Siguiendo una norma no escrita en la Magistratura "los jueces no entran en campaña" por lo que es probable que no se adopte una decisión al respecto hasta después del 20-N.