El lehendakari, Patxi López, ha recordado, en el Día de la Memoria, a todas las víctimas, sin realizar "equiparaciones", pero ha advertido de que "el que muere queriendo matar no es una víctima, sino un asesino frustrado"
Estas manifestaciones forman parte de la declaración institucional del lehendakari, Patxi López, con motivo del Día de la Memoria. En el acto, organizado por el Gobierno vasco, se ha plantado un roble en los jardines del Palacio de Ajuria Enea, junto a la escultura que recuerda a las víctimas, para "recordar el precio que el pueblo vasco ha pagado por defender la libertad, el autogobierno y las instituciones democráticas en Euskadi".
López ha recordado, tanto a las víctimas del terrorismo de ETA como a las de otros grupos terroristas como el GAL o el Batallón Vasco Español, así como "a todas las personas que sufrieron violación de derechos humanos por parte de algunos funcionarios del Estado".
En este sentido, ha aclarado que este recuerdo lo quieren hacer "sin equiparaciones de ningún tipo, sin diluir responsabilidades ni admitir justificaciones inaceptables". Asimismo, ha indicado que no va a permitir que se intente "ocultar la tragedia y la verdad de las víctimas del terror, acumulando falsas víctimas para desnudar a la memoria de su esencia de resistencia moral". También ha advertido de que "el que muere queriendo matar no es una víctima, sino un asesino frustrado".
El Día de la Memoria de las Víctimas del Terrorismo ha dividido hoy al Parlamento Vasco, que ha celebrado dos ofrendas florales en el mismo acto, una organizada por la Presidencia de la Cámara, del PP, y apoyada por el PSE y UPyD, y otra impulsada por PNV, Aralar, EA y EB.
Parlamentarios del PNV, Aralar, EA y EB han hecho su propia ofrenda floral a todas las víctimas, incluidas las de abusos policiales, molestos por la decisión de la presidenta del Parlamento, la popular Arantza Quiroga, de colocar una inscripción en recuerdo solo de las víctimas del terrorismo. Quiroga había organizado una ofrenda floral en la sede de la institución, en Vitoria, para conmemorar el Día de la Memoria, a la que había invitado a todos los parlamentarios.
Este acto, en el que no han participado asociaciones de víctimas, fue convocado después de que no fuera posible que instituciones vascas y partidos políticos consensuaran una iniciativa unitaria para conmemorar la segunda edición de esta efeméride. A la convocatoria han acudido representantes de todas las formaciones políticas de la Cámara pero durante el acto se han escenificado las divisiones.
La Presidencia del Parlamento ha colocado una corona de flores junto al monumento que recuerda a las víctimas en el exterior de la sede parlamentaria, con una inscripción, en euskera y castellano, que rezaba: "En memoria de las víctimas del terrorismo". Quiroga ha encendido la llama de un pebetero y posteriormente los parlamentarios del PNV, Aralar, EA y EB, molestos con esta frase, han colocado otro centro de flores, sin ninguna inscripción, ya que consideran que en este día también se tiene que reconocer a víctimas de motivación política, no solo a las del terrorismo.
Los parlamentarios del PP, PSE-EE y UPyD y la directora de la oficina de Atención a las Víctimas del Terrorismo del Gobierno Vasco, Maixabel Lasa, no han participado en esta segunda ofrenda floral.