En el Partido Popular están convencidos de que "los ladridos" de Alfonso Guerra y Felipe González, bajo el paraguas del candidato Rubalcaba, son fruto de una estrategia electoral "destartalada, de una huida hacia adelante". Sin embargo, ya advierten en Génova que no van a entrar en su juego.
Ni Mariano Rajoy ni tampoco ninguno sus primeros espadas salieron a contestar las insinuaciones vertidas desde Dos Hermanas. "Están a la desesperada y no les vamos a hacer el trabajo", arguyó una fuente autorizada. Y de ahí que la respuesta recayera en Carlos Floriano, uno de los responsables de la comunicación del partido, dentro del equipo de Esteban González Pons.
De "asquerosas" y "repugnantes" definió las palabras de González y Guerra el portavoz popular, para incidir en lo "insidioso" del discurso. "Una mezcla entre la mentira y el tratar de hacer electoralismo con la muerte de tanta gente", declaró a las agencias de comunicación.
Aunque dejó claro que la respuesta del PP queda aquí porque su formación sólo hablará "de los problemas que interesan a los ciudadanos" y, por lo cual, no piensa entrar en los "insultos", Floriano sí que quiso hurgar en la herida de los egos al tachar de "patético" que Rubalcaba pareciera "el telonero" del mitin sevillano.
El PSOE, resumió, se caracteriza "por el despilfarro y la corrupción", como así fue -aseguró- cuando González era presidente. Una "corrupción felipista que tiene su ejemplo" en José Blanco, salpicado por la denominada Operación Campeón.