Medio centenar de personas convocadas por el sindicato CGT y los indignados catalanes se han concentrado a las puertas del pabellón deportivo de Castelldefels donde el PP ha celebrado su acto de apertura de campaña.
Con banderas del sindicato y una pancarta en la que se podía leer "El pueblo unido funciona sin partido", los sindicalistas e indignados coreaban lemas como "No hay pan para tanto chorizo" o su clásico "No nos representan". Cargados con bocinas y un ataúd de cartón con la consigna 'Rip democracia', también gritaban "No somos mercancía en manos de políticos".
La fuerte presencia policial, que igualaba casi el número de manifestantes, ha impedido que se produjeran incidentes, aunque sí ha habido pequeños altercados con los simpatizantes del PP que les recriminaron sus provocaciones. Los indignados no han sido desalojados, sino instados a abandonar la calzada y a alejarse unos metros del recinto.
La agitación frente al lugar donde Rajoy protagonizaba su primer acto de campaña contrastaba con la absoluta tranquilidad que reinaba en el recinto de Alcalá de Henares donde Rubalcaba daba su mitin.
La sede de CDC, okupada
Pero la protesta contra Rajoy no ha sido el único incidente en este estreno de campaña. En Barcelona, pocas horas antes, un grupo de unos cuarenta antisistema irrumpieron en la sede de CDC. Los indignados clamaron contra el Gobierno de Mas y los recortes, y cantaron La Internacional y Els Segadors. Fueron desalojados por los Mossos a los veinte minutos.
Fuentes del partido indicaron que los manifestantes pertenecen a Izquierda Anticapitalista y que la protesta fue convocada mediante Twitter.