El Ministerio del Interior ya trabaja, al igual que el Gobierno vasco, en la llegada de etarras a España tras las elecciones del próximo 20 de noviembre. Estos terroristas serían los que ya no tienen causas pendientes con la Justicia, al haber prescrito los delitos, o los que tienen causas de escasa relevancia, según la visión del Ejecutivo.
Tal y como informa ABC, desde Interior estiman que en estos momentos podría haber entre 150 y 200 etarras que reunirían estas condiciones y que actualmente se encuentran repartidos en varios países de América, África e incluso en Francia.
Muchos de los que se encuentran en países como Cuba, Venezuela o Uruguay tienen importantes crímenes a sus espaldas cometidos durante la década de los ochenta. Éstos serían por tanto los grandes beneficiados puesto que sus múltiples asesinatos ya habrían prescrito. Así podrían volver a España sin riesgo de ir a la cárcel.
En este sentido hay casos de etarras que han pedido información a través de los consulados para saber si tienen causas pendientes con la Justicia española. Cabe destacar además que los terroristas instalados en Hispanoamérica pertenecen al sector más duro y más criminal.