Protagoniza actos con mujeres, se deja agasajar por ellas y se declara el más ferviente feminista. Sin embargo, todo es fachada en Rubalcaba. Atendiendo a los datos ofrecidos por el PSOE crece el número de mujeres en las listas por lo que parece que el candidato sigue la estela de Zapatero e incluso la supera. Pero nada más lejos de la realidad.
De hecho, la consternación entre las diputadas socialistas durante la elaboración de las listas era evidente ante su pérdida de influencia y la más que previsible caída en picado de presencia de mujeres del partido en las Cortes.
La política propagandística de Rubalcaba en este asunto es clara. Ha vendido que ha aumentado un 46 por ciento el número de mujeres que irán de número uno por sus provincias para el Congreso. En total, para el 20-N, 19 de los 52 cabezas de listas serán mujeres. Y se ha vendido aquí el compromiso del candidato con las mujeres.
Sin embargo, el número de hombres en los puestos de las listas en los que es factible conseguir un escaño es mucho mayor que el de mujeres. En Ferraz son conscientes de la más que probable debacle socialista con la consiguiente pérdida de hasta más de 60 escaños, tal y como vaticinan muchas encuestas. Esto dejaría a muchos socialistas sin escaño. Y es en estos puestos reales de las listas en los que se puede conseguir un asiento donde se ha llenado de hombres.
Y de ahí el enfado de muchas socialistas que han advertido la maniobra de Rubalcaba. Cumple con la Ley de Igualdad pero las socialistas podrían ver que cómo en la próxima legislatura la diferencia en el porcentaje entre hombres y mujeres en el grupo socialista es mucho mayor a partir del 21 de noviembre.
Este lunes se rodeó de mujeres en un acto y al igual que para él la importancia de las mujeres socialistas es relativa también fue la atención que éstas prestaron al candidato socialista.