Pero lo mejor es que esos jóvenes que van academias o casas particulares de alguno de esos sindicalistas, encima hacen que se ganen un sobresueldo, igual de ilegal, para los que han metido a dedo, ya que no tienen compatibilidad para ello. Pero todos los saben y nadie dice nada. Que pena de sociedad corrompida que mientras unos se lucran otros creen que tendrán alguna oportunidad. Esto es lo que da el socialismo.