La tijera llegó a los sindicatos en las Islas Baleares. Y de que forma. "Se tienen que apretar el cinturón como todos lo hacen", argumenta el Ejecutivo de José Ramón Bauzá, que ha ordenado desinflar la amalgama de ayudas al sector y purgar a los liberados. "No temo a la agitación en la calle de estos colectivos, más agitada está la economía y el bolsillo de los ciudadanos", advirtió el presidente la pasada semana, cuando aún perfilaba el ambicioso plan de ajustes.
Un recorte acorde con la "grave situación económica" y que supondrá la eliminación del setenta por ciento de los liberados sindicales "si no más", a la espera de la negociación con los mismos. Lo que sí que está cerrado es dejar en suspenso el acuerdo sobre acción sindical suscrito en 2006, lo que se traduce en una serie de medidas concretas.
El Gobierno dará, tras el Consejo del viernes, vía libre para acabar con todos los liberados sindicales institucionales, los créditos horarios por encima de los mínimos fijados por la Ley Orgánica así como las subvenciones a organizaciones sindicales que provenían del denominado Fondo de Acción Sindical.
Medidas, explican las fuentes consultadas, cuyo ahorro será "muy considerable", a la espera de ser calculado. Además, se dejarán libres espacios ocupados por los sindicatos, lo que aportará "mucho dinero" a las arcas.
Plan de ajuste de las empresas públicas
Estos ajustes se encuadran dentro del Plan Bauzá para el saneamiento de las cuentas, una vez constataron tras las pertinentes auditorias que el anterior Gobierno dejó un "suma y sigue" de agujeros. Y el mejor ejemplo de que las cosas empiezan a funcionar son los 26 millones de euros ahorrados gracias a la reducción de 13 a 6 consejerías y de 71 a 31 directores generales.
Clave en todas estas operaciones está siendo la Oficina de Control Presupuestario, que ya trabaja con el objeto de adelgazar otro sector importante como es el público. Concretamente, en las próximas semanas Bauzá anunciará un plan de "reducción y racionalización" de las 190 empresas públicas. El motivo: "La maraña actual es ingestionable y su orden traerá consigo, irremediablemente, ahorro".