Durante este miércoles por la noche, miles de indignados han vuelto a manifestarse en los aledaños de la Puerta del Sol, a la que la Policía continúa impidiéndoles el acceso. Igual que sucedió este martes, por segundo día consecutivo Metro de Madrid y Cercanías han cerrado la salida a la Puerta del Sol, aunque eso no ha desalentado al millar de personas que acudieron desde las 20:00 horas a los aledaños de la Puerta madrileña. Concentrados tras la marcha, los ‘indignados’ celebraron una asamblea en mitad de la Gran Vía madrileña, con el objetivo de aprobar más acciones de protesta.
El tráfico ha permanecido cortado durante el transcurso de la reunión, a la altura de la Plaza del Callao, aunque los asistentes se han levantado para permitir el paso a un camión de bomberos entre aplausos, según informa Efe. De nuevo, los conductores madrileños han tenido que sufrir cortes de tráfico en esta arteria madrileña, y también en las cercanías de Atocha.
Entre los participantes, un ciudadano ha tomado la palabra para proponer que se acampe en las inmediaciones del Palacio Real o la Catedral de la Almudena, lo que ni se ha aprobado ni tampoco se ha descartado, tras opinar que la visita del Papa es la causa del desalojo de Sol.
Otro asistente ha dicho que si la policía les echa, "habría que llevar el espíritu del movimiento a todas las plazas y barrios de España" y ha pedido que se instalen puntos de información en todas las asambleas zonales. En la reunión se ha planteado un nuevo objetivo, olvidándose de "recuperar Sol a toda costa", para "continuar en las calles". Según el comunicado final, "si la policía ocupa Sol, hay más plazas"
Finalmente, la asamblea ha acordado lo que Democracia Real Ya denomina la ‘Toma de Madrid’, según explica la plataforma: "La asamblea en Gran Vía decide: la TOMA DE MADRID, a las 12h desde Pza Oriente y a partir de ahí todo el mundo a Sol durante todo el día, ya que la PLAZA ES DEL PUEBLO. ¡Acude y difunde! #vuelvealaplaza" aseguran.
Por lo tanto, a partir del mediodía Madrid vivirá una nueva manifestación de los indignados, que no descartan aprobar otra convocatoria para la "tarde-noche".