Los socialista en el gobierno en la Junta de Comunidades castellanomanchega aseguran que toman la decisión ante la "deslealtad" del PP al alarmar con "datos falsos" del estado de las cuentas públicas.
Así lo ha indicado a Efe el consejero de Presidencia, Santiago Moreno, que ha indicado que se han suspendido las dos reuniones previstas para el lunes para analizar con responsables del PP el traspaso de poderes en las consejerías de Ordenación del Territorio y Vivienda y Salud y Bienestar Social.
En su lugar, se celebrará una reunión informal de todos los consejeros en funciones del Ejecutivo autonómico, para estudiar la situación creada por la alarma generada por las afirmaciones del secretario general del PP castellanomanchego, Vicente Tirado, que ayer aseveró que la región está en "quiebra total" y que la Junta no tiene dinero ni para pagar las nóminas de los empleados públicos.
Moreno ha declarado que esta afirmación de Tirado es "rotundamente falsa", ya que él mismo le comunicó en la primera reunión de las seis que han mantenido que el dinero para el pago de las nóminas de los empleados públicos está garantizado.
También ha negado que sean ciertos los datos sobre la supuesta deuda que dio ayer Tirado, que habló de que la Junta debe a los proveedores 2.000 millones de euros, ya que no se basa en ninguna información real y contrastada, ha aseverado Moreno, quien ha añadido que se está facilitando a los representantes del PP toda la documentación que están solicitando.
A su juicio, las declaraciones de Tirado pueden obedecer a una estrategia de ofrecer datos deliberadamente distorsionados y alarmistas, para justificar determinadas decisiones "traumáticas" que podría tomar el futuro Gobierno que presidirá María Dolores de Cospedal.
En cualquier caso, Moreno ha dicho que tras la reunión del lunes volverá a ponerse en contacto con Vicente Tirado.