L D (EFE) El joven, que deberá comparecer este martes ante un tribunal, ha sido acusado también de pertenencia al grupo proscrito IRA de Continuidad –escisión del ya desmovilizado Ejército Republicano Irlandés (IRA)–, posesión de arma de fuego y de recabar información de utilidad para terroristas, dijeron las fuentes.
El agente Stephen Carroll, de 45 años, fue asesinado el 9 de marzo de un tiro en la nuca que recibió por la ventana trasera de su coche patrulla cuando investigaba la llamada de una mujer en la localidad norirlandesa de Craigavon.
Otras cuatro personas permanecen bajo custodia en relación al suceso, mientras que cuatro más están siendo interrogadas por el atentado cometido dos días antes, y reivindicado por el IRA Auténtico, contra una base militar en el condado de Antrim, en el que murieron dos soldados. Este mismo lunes otros dos hombres, de 27 y 31 años, que habían sido arrestados por la muerte del agente, han sido puestos en libertad sin cargos.
Paralelamente, la comisaria norirlandesa para los Derechos Humanos, Monica McWilliams, condenó la prolongada detención sin cargos de los ocho sospechosos, seis de los cuales han presentado un recurso ante el Tribunal Superior de la provincia.