LD (EFE) En una clase magistral en el Instituto Estatal de Relaciones Internacionales de Moscú, el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguei Lavrov, dijo que "si EEUU y sus aliados finalmente optan no por sus intereses nacionales o los del pueblo georgiano, sino por el régimen de Saakashvili, que nada ha aprendido, será un error de magnitud histórica". Al referirse a las relaciones con Washington, el titular de Exteriores señaló que Rusia está dispuesta a desarrollar sus relaciones con cualquier administración que se instale en la Casa Blanca. Añadió que "pero nuestros socios estadounidenses deben entender que las relaciones entre las principales potencias mundiales pueden edificarse sólo sobre la base de una rigurosa reciprocidad y honestidad total".
Citado por la agencia de noticias Interfax, Lavrov sostuvo que "el fantasma del gran juego nuevamente se pasea por el Caucaso" y mantuvo que "Rusia ha vuelto a la arena internacional como un Estado responsable, capaz de defender a sus ciudadanos". Subrayó enseguida que al destacar que la "operación de imposición de la paz a Georgia" y el reconocimiento de las independencias de Osetia del Sur y Abjasia despejan toda duda que pudiera haber al respecto.
El ministro de Exteriores sugirió la imposición de un embargo internacional a las ventas de armas a Georgia por su agresión a Osetia del Sur. Dijo que "para empezar, serí correcto imponer un embargo a los suministros de armas a ese régimen (de Saakashvili) hasta que otras autoridades conviertan Georgia en un Estado normal".
Lavrov indicó que la reacción de algunos países occidentales a la "crisis suroseta" deja en evidencia su "déficit de moral", pues se basa en argumentos de orden geopolítico e ideológico "sin relación con la realidad". Enfatizó que "no nos dejaremos arrastrar a ningún tipo de confrontación; aquellos que gustan de esquemas de confrontación tendrán que apañárselas sin nosotros".