L D (EFE) "Se estudiaron todas las vías para establecer la causa de su estado, y el asunto ahora forma parte de una investigación en curso que dirige Scotland Yard", dijo un portavoz del hospital londinense al subrayar que los médicos hicieron todo lo posible por salvar al enfermo.
Desde Scotland Yard, otros portavoz también señaló que "aunque, hasta el momento, no se ha producido una identificación formal, estamos seguros de que el fallecido es el señor Litvinenko y el caso se está investigando como una muerte inexplicada".
Desde comienzos de noviembre, el ex espía había permanecido, bajo protección policial, en la unidad de cuidados intensivos del hospital, donde ingresó tras enfermar repentinamente por un supuesto envenenamiento. En un principio, los médicos estudiaron la posibilidad de que Litvinenko hubiera sido intoxicado con talio, una especie de raticida inodoro, incoloro e insípido, capaz de causar la muerte con sólo un gramo, o incluso por radiación.
Sin embargo, el director de cuidados intensivos del University College, Geoff Bellingan, señaló que, pese a las numerosas pruebas realizadas, no está claro qué es lo que ha causado elgrave deterioro del antiguo agente secreto, que perdió el cabello súbitamente y cuyo sistema inmunológico sufrió graves daños.
Desde Scotland Yard, otros portavoz también señaló que "aunque, hasta el momento, no se ha producido una identificación formal, estamos seguros de que el fallecido es el señor Litvinenko y el caso se está investigando como una muerte inexplicada".
Desde comienzos de noviembre, el ex espía había permanecido, bajo protección policial, en la unidad de cuidados intensivos del hospital, donde ingresó tras enfermar repentinamente por un supuesto envenenamiento. En un principio, los médicos estudiaron la posibilidad de que Litvinenko hubiera sido intoxicado con talio, una especie de raticida inodoro, incoloro e insípido, capaz de causar la muerte con sólo un gramo, o incluso por radiación.
Sin embargo, el director de cuidados intensivos del University College, Geoff Bellingan, señaló que, pese a las numerosas pruebas realizadas, no está claro qué es lo que ha causado elgrave deterioro del antiguo agente secreto, que perdió el cabello súbitamente y cuyo sistema inmunológico sufrió graves daños.
El Kremlin concentra todas las sospechas
Litvinenko enfermó el pasado día 1 después de reunirse en secreto con Mario Scaramella, un profesor universitario italiano con buenos contactos en el mundo del espionaje, en un restaurante japonés en el centro de Londres. Al parecer, según la prensa británica, Scaramella le facilitó nombres de las personas que podrían estar involucradas en el asesinato de la periodista rusa Anna Politkovskaya.
Litvinenko, ex agente del Servicio Federal de Seguridad (antiguo KGB soviético), refugiado en el Reino Unido desde 2000, y sus allegados llegaron a culpar al espionaje ruso de haberle envenenado por sus críticas a Putin, también ex agente del KGB. Según indicó hace tres días el magnate ruso Boris Berezovsky, también opositor al Kremlin, tras visitar al enfermo, éste creía que "fue organizado en Moscú y que Putin dio la orden de envenenarle porque es un ex agente del KGB".
Litvinenko ya había asegurado en el pasado que el espionaje ruso había conspirado también para asesinar al propio Berezovsky, exiliado igualmente en el Reino Unido. El Servicio de Espionaje Exterior (SVR) de Rusia ha negado cualquier implicación en el aparente envenenamiento de Alexander Litvinenko.
Este suceso ha recordado la época de espionaje de la "guerra fría", en particular el caso del disidente búlgaro Georgi Markov, envenenado con ricina a través de la punta de un paraguas mientras cruzaba el puente Waterloo, en el centro de Londres, en 1978. El caso de Markov, exiliado en el Reino Unido por sus críticas a la jerarquía comunista búlgara, tampoco está totalmente aclarado, ya que su asesino no fue nunca encontrado, si bien los medios británicos creen que se trató de la policía secreta de Bulgaria.