Los cooperantes españoles Albert Vilalta y Roque Pascual fueron secuestrados el pasado 29 de noviembre de 2009 junto a Alicia Gámez (liberada en marzo) en la carretera que une Nuadibú (norte de Mauritania) con Nuakchot, cuando viajaban en la caravana humanitaria de la ONG Barcelona Acció Solidaria.
Este lunes, el Gobierno español confirmaba lo que horas antes habían anunciado tanto el canal de noticias árabe "Al Arabiya" y la página noticias mauritana Sahara Media (árabe), que tanto de Vilalta como de Pascual habían sido puestos en libertad. Lo que no se conoce con precisión es el precio del rescate pagado a los terroristas.
El diario El Mundo informaba en su edición de este lunes que se habría pagado un rescate de 3,8 millones de euros, una cantidad que habría sido hecha efectiva hace ya algunos meses.
Una cifra mayor baraja la televisión emiratí Al Arabiya, que cifra el rescate en entre cinco y diez millones de euros. En una conexión en directo, el corresponsal de la emisora en Nuakchot señaló que la liberación se ha conseguido, además, gracias a la reciente extradición a Mali de Omar Uld Sid'Ahmed Uld Hame, más conocido como Omar Saharaui, condenado a 12 años de prisión en Mauritania por su participación en el secuestro.
El corresponsal de Al Arabiya, que identificó a sus fuentes, agregó que el tema del rescate se cerró en un acuerdo logrado en distintos países africanos. El periodista de la cadena árabe destacó, también, que el mediador más importante en el asunto del secuestro llegó el domingo al bastión de Al Qaeda en el norte de Mali.
Con anterioridad, la propia televisión emiratí y la página web mauritana "Sahara Media" habían anunciado la liberación de los rehenes. Según dijeron fuentes locales en el norte de Mali al sitio digital mauritano, los dos rehenes "se encuentran todavía en Mali, a la espera de las gestiones para su regreso a Madrid, a través de un mediador", cuya identidad no ha sido mencionada.
El secuestro más largo en la zona
Vilalta y Pascual fueron secuestrados junto a Alicia Gámez (liberada en marzo) el pasado 29 de noviembre en la carretera que une Nuadibú (norte de Mauritania) con Nuakchot, cuando viajaban en la caravana humanitaria Barcelona Acció Solidaria.
Sus casi nueve meses de cautiverio, presumiblemente en el desierto del norte de Mali, suponen el secuestro más largo perpetrado por AQMI, que reivindicó la acción en un comunicado.