El Ejército y la Policía tunecina han cargado contra una manifestación de cerca de 1.000 personas en el centro de Túnez que demandaba la disolución de la Reagrupación Constitucional Democrática (RCD), el partido en el poder del presidente huido, Zine el Abidine Ben Alí.
Las fuerzas de seguridad lanzaron botes de humo y usaron cañones de agua contra los manifestantes y efectuaron disparos al aire para disolver la protesta, que recorría la popular avenida Habib Burguiba de la capital