Según El diario Montañés, la presidenta trata de caer en gracia a los argentinos en un momento en el que se encuentra acorralada por su gestión de los problemas financieros del país. Y es que Kirchner apenas goza de las simpatías del 20% de los argentinos, por su desastrosa gestión de los problemas del campo, la oposición, la deuda externa e incluso los EEUU.
Kirchner hizo caso a sus asesores y abandonó su habitual estilo envarado, y tratando de mostrarse más cercana a los argentinos, reveló que la carne cerdo puede mejorar la vida sexual, poniendo como ejemplo el último fin de semana pasado con su marido, Néstor Kirchner. El diario Montañés revela los esfuerzos de la mandataria durante sus últimas apariciones, como en la de un acto con los productores porcinos, ante una tribuna enteramente masculina.
La presidenta reconoció allí que la carne de cerdo "tiene mala prensa" en su país, donde la gente cree que engorda. Además, y para convencer a la platea, arrojó la idea de que este tipo de carne mejoraría la actividad sexual, algo que "no es un dato menor. Yo estimo que es mucho más gratificante comerse un cerdito que tomar Viagra".
A pesar de que dicha teoría ha sido desmentida por científicos y nutricionistas, según el diario, la picardía de la presidenta despertó las consabidas risitas entre el público, que acabó rompiendo en una carcajada nerviosa. "Les comento que yo soy fanática de la carne de cerdo. Y no lo digo para quedar bien ni para hacerme propaganda de nada", gritó casi nerviosa y entre risas ella también. "Kirchner me va a matar cuando vuelva.", confesó.
Pero como señala El diario Montañés, todavía faltaba lo mejor. "El anterior fin de semana, cuando estuvimos en El Calafate, nos comimos un cerdito a la parrilla riquísimo al aire libre, y no sólo me comí la carne sino también el cuerito crocante, y anduvo todo bien el fin de semana, así que puede ser que tengan razón".
El momento fue publicado en internet, y según señala el diario, el atrevimiento presidencial causó más vergüenza y fantasías que simpatía. No obstante, Cristina parece poco dispuesta a abandonar sus esfuerzos. En un acto posterior, dijo que el pollo es una carne muy magra, que adelgaza. "Si uno está delgado y además hace actividad física, entonces siente que tal vez pueda volar, como los pollos".
