LD (EFE) En una rueda de prensa celebrada en Tallin, capital de Estonia, el secretario de Defensa de EEUU, Robert Gates, aseguró que la amenaza rusa de desplegar misiles tácticos en Kaliningrado no debería ser "la bienvenida que se merece la nueva administración estadounidense" del presidente electo Barack Obama.
Los "Iskander" (SS-26 Stone, según la clasificación de la OTAN) tienen un alcance de entre cincuenta y trescientos kilómetros y pueden portar distintas cargas de hasta 480 kilogramos.
Durante su participación en las consultas OTAN-Ucrania celebradas en Estonia, el jefe del Pentágono indicó que el escudo antimisiles que Washington tiene previsto emplazar en Polonia y la República Checa está dirigido contra países "parias", por lo que "no supone, en ningún caso, una amenaza para Rusia". En todo caso, aseguró que Washington aboga por mantener una relación positiva y constructiva.
El presidente ruso, Dmitri Medvedev, anunció la pasada semana en su primer discurso sobre el estado de la nación que Moscú desplegaría en Kaliningrado cohetes de la clase "Iskander" en respuesta al emplazamiento de elementos del escudo norteamericano en Europa del Este. En cambio, el ministro ruso de Exteriores, Serguei Lavrov, matizó el martes que Moscú sólo desplegará los misiles "en caso de que el escudo estadounidense sea físicamente emplazado" en Polonia y la República Checa.