Bindi recibió esta descalificación cuando defendió al presidente de la República, Giorgio Napolitano, de los ataques Berlusconi, que criticaba la postura del jefe del Estado respecto a la decisión del Tribunal Constitucional de invalidar la ley que otorgaba inmunidad a los cuatro principales cargos del país.
Ante el comentario de Berlusconi han surgido numerosas voces en apoyo de Bindi, entre ellas las del secretario general del PD, Dario Franceschini, que quiso expresar su solidaridad a la diputada y tachó de "ofensas vulgares" las palabras de Berlusconi.
Mientras, la responsable de cultura del PD, Giovanna Melandri, dio la vuelta al juego de palabras del primer ministro y señaló que con su comentario "ha demostrado ser más alto que educado". "Creo que las palabras que Berlusconi pronunció sobre Rosy Bindi demuestren por sí solas su profunda vulgaridad", manifestó la presidenta del PD en el Senado, Anna Finochiaro.