"El régimen no va a ser capaz de sobrevivir mucho más. Sus días están contados. Está cercano el día en que se produzca el entendimiento entre todos los cubanos en un régimen de libertad", señaló José María Aznar durante un acto de homenaje a los demócratas cubanos organizado por la Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales (FAES) en el Círculo de Bellas Artes de Madrid.
En palabras del ex presidente, se está produciendo "un cambio enorme" en la sociedad cubana, de manera "sutil pero imparable", que tiene por protagonistas a los cubanos que "no se dejan coartar en su libertad y que están haciendo surgir una sociedad civil contestataria contra los abusos del régimen".
El presidente de honor del PP recordó la figura del preso de conciencia cubano Orlando Zapata Tamayo, fallecido el pasado 23 de febrero tras una huelga de hambre, y que el pasado sábado habría cumplido 43 años. Su "heroica muerte" no fue "en vano", recordó, sino que engrandeció la causa de la libertad del pueblo cubano y su testimonio "permanecerá siempre al lado de la libertad".
Durante su intervención en el homenaje, al que también acudió la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, el ex presidente cargó contra quienes desde el Gobierno de España, "en sintonía con la dictadura", siguen defendiendo que la "posición común" de la UE hacia Cuba "es obsoleta".
"Son los mismos que cierran las puertas de la Embajada de España a los disidentes durante la celebración de la fiesta nacional. Los mismos que tratan de convencer a la Unión Europea para que se despeñe por un camino de condescendencia y complacencia que sólo beneficiaría a los hermanos Castro y sus acólitos", recalcó.
Esta actitud, alertó, "sería un gravísimo error" y convertiría a la UE "en cómplice de abusos, de la opresión, del terror, de asesinatos como el de Orlando Zapata" y "haría un daño incalculable a los héroes cubanos que luchan por la causa de la libertad".
Por el contrario, el ex presidente del Gobierno recordó que la "causa de la libertad es la más grande a la que se puede dedicar un ser humano" e hizo hincapié en lo "heroico" de algunos gestos como "vestirse de blanco o portar un lirio", en referencia a quienes de manera simbólica reflejan su oposición al régimen. "Estos héroes cotidianos no merecen luchar solos por la libertad de su pueblo. Y no van a estar solos. Estamos junto a ellos en esta lucha", incidió.
Tras hacer varios llamamientos para apoyar "con todas nuestras fuerzas" a los demócratas cubanos que luchan "por la libertad de su pueblo", Aznar recordó que el fin del comunismo en Europa fue posible "gracias a la valentía de los disidentes" y el "apoyo y presión ejercida contra las dictaduras desde el mundo occidental".
"Cuba –subrayó–, al igual que el resto de América Latina, es una parte sustancial de Occidente, y no hay nada que la condene de por sí a no disponer de Estado de derecho, libertades individuales, instituciones democráticas y respeto a los derechos humanos".
En este homenaje "a los auténticos héroes de Cuba", el presidente de FAES defendió que, a pesar de ellos, Cuba todavía necesita "una transición pacífica a la democracia" que exige una "posición común" desde Europa. Para ello abogó, además, por un diálogo constructivo con todos los sectores de la sociedad, y por condicionar "la relación con el régimen a la obtención de progreso efectivo en materia de derechos humanos".
No obstante, recordó que esa transición pacífica a la democracia "nunca llegará de la mano del apaciguamiento y de la complacencia". "Las muestras de buena voluntad con el régimen lanzadas desde ambos lados del Atlántico, sólo han dado lugar a oleadas de mayor represión hacia los disidentes. El dogmatismo de los dictadores de Cuba ha convertido a la isla en la mayor prisión del mundo, una prisión en la que los carceleros ejercen su poder contra todos y cada uno de los ciudadanos", argumentó.
En la misma línea, subrayó que cada gesto de "apaciguamiento o debilidad desde Occidente" ha sido respondido por la dictadura "con oleadas de represión", tal y como ocurrió, dijo, "con el asesinato de los ocupantes de las avionetas de la ONG Hermanos al rescate en 1996 o durante la primavera negra de 2003".
Aznar subrayó las figuras de Wilfried Martens, ex primer ministro belga y presidente del Partido Popular Europeo, y Alejandro Toledo, el ex presidente del Perú, como defensores de la democracia y la libertad y, al mismo tiempo, recordó que "cada uno de nosotros" tiene una "pequeña misión que cumplir" en esta lucha, "recordando cuantas veces podamos que la conquista de la libertad es tarea de todos, y que depende exclusivamente de la defensa firme de nuestras convicciones".
"Es necesario, por ejemplo, que cada turista, cada visitante a la isla, cada persona que hable con un cubano, se convierta en un mensajero de la libertad (...) Basta con que expliquen cómo se acabó con la tiranía en casi todo el mundo civilizado y cómo las personas tenemos derechos consustanciales a nuestra naturaleza humana que no nos pueden ser arrebatados en nombre de caducas utopías colectivistas", explicó.
El presidente de FAES, que al inició de su discurso recordó a los disidentes que el pueblo español está con ellos, con la democracia y la libertad, concluyó su intervención instando a los cubanos a no temer a la dictadura y ser valientes porque "la libertad está próxima".
Previamente, Wilfried Martens aseguró que durante la dictadura ha "variado el perfeccionismo" a la hora de intimidar a los cubanos pero sigue habiendo una dictadura. "No caigamos en el engaño. Los cubanos saben que todo sigue igual", recalcó, para añadir que ha aumentado la "represión" en las calles como "testimonia la persecución a las Damas de Blanco".
Además, lamentó que la situación que se vive en Cuba no haya sido una prioridad para la Presidencia española de la UE, algo que, según dijo, ha "desilusionado a muchos europeos". Dicho esto, aseguró que los pasos en la isla pasan por sufragio universal, liberación de los presos políticos y de conciencia, organización de un poder judicial independiente, protección de la libertad de expresión y legalización de todos los partidos. "Ése es el único camino, no hay atajos pero tampoco alternativas. Es la hora del cambio, del diálogo real", proclamó.
Por su parte, el ex presidente de Bolivia Jorge Quiroga defendió la necesidad de que todos los demócratas estén "en la lucha permanente por la democracia y libertad" que, según dijo, "no se hace con embargos y restricciones". Y citando a Martin Luther King señaló que lo que "duele es el silencio cómplice de los demócratas".
Como algunos de los ponentes anteriores, el ex presidente de Perú Alejandro Toledo aseguró que la muerte de Orlando Zapata no ha sido en vano y expresó su deseo de que haya una Justicia justa "con jueces independientes, dónde la dictadura no sea juez y parte". También expresó su deseo de que la Cumbre UE-América Latina sirva para "expresar algo de la libertad y la democracia".