Nicolás Sarkozy ha comparecido en rueda de prensa tras finalizar la operación contra Mohamed Merah, sobre el que ha dicho que "se ha hecho todo lo posible para que respondiera ante la justicia".
El jefe del Ejecutivo galo ha asegurado que, "Francia ha pasado una prueba" pidiéndole a los franceses que no se dejen "llevar por su cólera", ya que "nuestros compatriotas musulmanes nada tienen que ver" con los asesinatos del terrorista.
Sarkozy argumentó que "antes de morir el asesino también intentó asesinar a musulmanes" e hizo un llamamiento a los líderes de todas las religiones para reforzar la "convivencia" y evitar el extremismo.
Además del llamamiento a la unión y la unidad de todos los franceses, Sarkozy también ha anunciado nuevas medidas para combatir el terrorismo. Estas irán dirigidas, precisamente, a los puntos en los que se ha fallado provocando que un hombre como Mohamed Merah pudiera saltarse todos los controles del Estado y acabar cometiendo crímenes como los de Toulouse y Montauban.
Así, Sarkozy anunció que "cualquier persona que visite reiteradamente un sitio de internet haciendo apología del terrorismo, será acusado formalmente de propagación del terrorismo. Serán perseguidos y castigados".
Por otro lado, en clara alusión a los viajes a Kandahar del asesino de Toulouse, anunció que también serán perseguidos quienes "realicen viajes al extranjero con objetivos terroristas". Ha dicho que Francia no permitirá "la propagación de la ideología extremista en nuestras cárceles" por lo que el Ejecutivo había encargado un estudio al respecto.
Para llevar a cabo estas modificaciones, Sarkozy anunció que modificará el Código Penal y la Ley Antiterrorista, porque "Francia acaba de pasar una prueba, y estas son las conclusiones".
Por último, ha concluido que: "La unión y la unidad deben ser nuestras prioridades. La firmeza al servicio de la República".