El ex primer ministro de Italia Silvio Berlusconi declaró en un cuestionario de la agencia EFE que el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, es el mandatario europeo "que mejor ha entendido que hay que centrarse en el crecimiento para limitar los efectos recesivos de la austeridad".
En la primera entrevista que Berlusconi (primer ministro en 1994, 2001-2006 y 2008-2011) otorga a una agencia internacional de noticias tras su dimisión el 12 de noviembre pasado, el político dijo que "Rajoy es un liberal-demócrata que estimo de verdad, pero dimití antes de haber podido colaborar con él a nivel de Gobierno".
"Aprecio -dijo- la determinación con la que Rajoy ha iniciado su política económica: ha hecho los recortes necesarios (...) y los mercados le han otorgado su confianza". "Creo de todas formas -continuó- que en España se ha abierto un periodo político que corresponde a sus dotes de sobriedad y de tenacidad".
Y comentó que "España es un país al que me encuentro muy ligado no solo porque me ha permitido desarrollar con éxito mi actividad de empresario (grupo Mediaset España), sino, sobre todo, por su modo de afrontar las cosas de la vida, que hace que te entiendas enseguida y se sienta uno en casa, entre amigos".
Berlusconi, de 75 años, se refirió a "vuestro extraordinario rey Juan Carlos" y a la "relación de amistad" que mantiene con el expresidente José María Aznar, una amistad que "ha ido más allá de los cargos" que han representado y de quien dijo que "ha sido un gran primer ministro en un momento de profunda alteración de la historia". "Ha sido unos de los jefes de Gobierno con el que he tenido una gran sintonía, política y personal", aseveró.
El político conservador tiene todavía pendientes cuatro procesos judiciales, los casos Mills, Ruby, Mediaset y Unipol. Denunció que contra él existe "una campaña de calumnias, de persecución judicial y de difamación a nivel internacional dirigidas por una casta de magistrados (que por suerte son solo una parte de la magistratura italiana) y de órganos de información políticamente alineados que hacen de portavoces de la oposición y de la misma casta judicial de la extrema izquierda". "Es un daño más para Italia y no para mí personalmente", sostuvo.
Sobre las reformas económicas que lleva a cabo su sucesor al frente del Gobierno, el tecnócrata Mario Monti, Berlusconi refirió que su Ejecutivo había comenzado a hacerlas sin poder terminarlas debido, entre otras causas, "al rechazo de los aliados de nuestra coalición", en referencia a la Liga Norte.
Berlusconi brindó su apoyo a Monti al asegurar que puede contar con la "leal colaboración" de su partido el Pueblo de la Libertad (PDL) y la suya personal. "Conozco bien su seriedad y competencia y estoy a su lado con lealtad", señaló. "Es más -dijo-, le animo a concluir el trabajo iniciado y a afrontar sin dudar todas las medidas necesarias para liberarnos de las barreras estructurales y burocráticas que obstaculizan el crecimiento". Y añadió que, sin embargo, "gracias al apoyo de la mayoría y de la oposición, este Gobierno técnico debe también realizar la reforma de las instituciones, indispensable para la gobernabilidad de Italia".
Tras alabar la política económica de Monti, Berlusconi declaró que él fue el primero en advertir de que "era necesario invertir para relanzar la economía y, que las inversiones en infraestructuras tendrían que estar favorecidas por la emisión de eurobonos".
Preguntado si considera afortunadas las declaraciones de Monti sobre la movilidad laboral de los jóvenes, el presidente del PDL interpretó que lo que quería decir el excomisario europeo es que "en el mundo actual, el objetivo no puede ser jamás el puesto de trabajo fijo, sino el trabajo en sí, porque semejante garantía no se puede ya asegurar". "Nadie mejor que yo puede mantener esta tesis. En mi vida jamás he parado, jamás me he acomodado en los éxitos, siempre he afrontado retos nuevos: el sector de la construcción, la televisión, el deporte, la política...", comentó.
Berlusconi confirmó que no se presentará a la reelección como presidente de Gobierno en las elecciones de 2013 y citó como su sucesor al que fuera su ministro de Justicia, Angelino Alfano, "que tiene 35 años menos que yo" y "es un joven brillante", hoy secretario general del PDL. "Yo haré el papel de padre fundador y contribuiré a la campaña electoral cuando este Gobierno técnico concluya y se reanude el curso normal de la democracia".