Durante su discurso del Informe anual a la Nación ante la Asamblea Nacional –que presenta cada año en la fiesta nacional- Correa aprovechó para seguir fustigando a los medios de comunicación y sus ataques se dirigieron sobre todo contra los que se han mostrado críticos con su gestión.
El presidente opinó que debe abrirse un debate sobre el rol de la prensa y propuso reflexionar sobre varios aspectos que para él son claves para regular los abusos de ciertos medios de información. "¿Debe ser la prensa un contrapoder del Gobierno, como ellos mismos se definen cuando les conviene?" y "¿Cuál es el contrapoder contra el mayor poder fáctico de América Latina, que es la prensa?", fueron dos de las interrogantes planteadas.
Sus ofensivas contra la prensa comenzaron hace un tiempo y tuvo un capítulo clave hace algunas semanas cuando un juez dio la razón a Correa en un juicio contra los dueños del diario El Universo y su ex jefe de opinión, Emilio Palacio, por una columna que consideró ofensiva. El texto señalaba que el 30 de septiembre de 2010 –día del levantamiento policial- Correa ordenó "fuego a discreción y sin previo aviso contra un hospital lleno de civiles y gente inocente". La pena del juez fue de tres años de prisión y un pago de 40 millones de dólares (28 millones de euros) al presidente, pese a que éste pedía exactamente el doble.
El mismo día de la sentencia, el mandatario dijo que la sociedad debe reaccionar con este ejemplo y luchar por demandar a los medios de comunicación que, abusando de su poder mediático y su "patente de corso", injurian, calumnian y hacen política ilegítimamente.
En su discurso de este miércoles, Correa señaló además que "el debate de fondo es si los medios de comunicación deben o no participar en política" y remarcó que ciertos medios "sólo son contrapoder de ciertos intereses políticos, de otros son descarados cómplices". Criticó la discrecionalidad que tiene las empresas de comunicación para difundir sus contenidos y censuró que los medios se escuden en la tolerancia para justificar sus excesos. "Toda persona tiene derecho a la libertad de expresión", incluido el presidente del país, añadió Correa, quien opinó que es un absurdo reclamar tolerancia en América Latina, que lo que requiere es "la verdad".
Cinco titulares iguales
El mismo día en que Correa pronunció su discurso, cinco diarios de Ecuador abrieron con la misma portada con el titular: "Por la libre expresión". La Hora, El Universo, Expreso, El Hoy y El Comercio abrieron su edición impresa con la mitad de la portada con fondo blanco y grandes titulares en negro y rojo, que dicen la citada frase.
Un texto que aparece bajo los titulares dice: "Reacciones por la sentencia al diario El Universo. El 20 de julio, la libertad de expresión en el Ecuador recibió un duro golpe con la sentencia contra el exdirector de Opinión y tres directivos de El Universo. Voces nacionales y mundiales han criticado una sanción, que sin ratificarse, creará un grave precedente, no solo en el país".
Enfrentamiento en Perú
Hace algunos días, Rafael Correa viajó a Perú para acompañar a Ollanta Humala en la ceremonia de juramentación como nuevo presidente. Entre sus actividades presentó en la Feria Internacional del Libro de Lima su libro "Ecuador: de Banana Republic a la No República". Durante el acto, Correa no dejó pasar la oportunidad de volver a arremeter contra los medios: "La oligarquía latinoamericana, a diferencia de otros lugares, siempre ha buscado concentrar los frutos del progreso para diferenciarse. Y cuando ya no lo pudo hacer por medio de mitos, como se hizo antes, ahora emplean los poderes fácticos, como los medios de comunicación y el mal entendido concepto de libertad de expresión, para poder sacar presidentes y seguir dominando y manejando nuestro país".
Estas declaraciones provocaron serias críticas del diario peruano Correo que presentó una portada contar el mandatario al que declaraba como "persona non grata" en Perú. El ecuatoriano llegó a referirse al periódico y tuvo palabras muy duras con el mismo. El problema creció cuando el Ministro de Relaciones Exteriores peruano, Rafael Roncagliolo, tomó partido y defendió al presidente Correa, provocando la indignación del diario y también de otros periodistas peruanos que criticaron la postura del canciller.