El edificio, que llevará el nombre de Kingdom Tower, es un proyecto del multimillonario príncipe saudí Alwaleed bin Talal, que ha firmado para su construcción un acuerdo por 4.600 millones de riales (870 millones de euros) con el Bin Laden Group. Tardará en levantarse cinco años.
Su altura aún es un misterio aunque sí se sabe que se convertirá en la torre más alta del mundo, pues medirá más de un kilómetro. Hasta ahora, el récord lo ostentaba la torre Burj Jalifa, en Dubai, con 828 metros.
El edificio albergará, entre otras cosas, oficinas, apartamentos de lujo y un hotel. Estará diseñada por la firma estadounidense Adrian Smith + Gordon Gill.