A pesar de que a Zapatero le quedan escasos meses al frente de la presidencia del Gobierno español, The Wall Street Journal no piensa olvidar los desatinos de su política internacional. En esta ocasión, su periodista Anastasia O’Grady le dedica un durísimo artículo al aún jefe del Ejecutivo: "España traiciona a los disidentes cubanos" titula su información.
Comienza alabando el potencial turístico de nuestro país del que se puede disfrutar "a menos que usted sea un prisionero cubano de conciencia que fue deportado y depositado aquí por la dictadura militar de La Habana". En ese caso, "la vida como un extraño en la soleada Península Ibérica es económica y psicológicamente sombría", asegura WSJ.
Así, le afea a Zapatero que haya participado de ese engaño que los Castro llaman "liberación" de presos y que no es más que un "exilio", como documentan las pruebas. "Se les permitió irse con sus familiares cercanos y llevarse una muda de ropa de Cuba pero no despedirse de sus amigos y del resto de su familia y no se les expidió un pasaporte" relata el diario, testimoniando que al llegar a España "han tratado de obtener el status de refugiados políticos pero el gobierno español no ha estado ansioso por concederlo. Como resultado, muchos de ellos todavía no tienen documentos permanentes", relata.
De lo que WSJ se muestra realmente sorprendido no es de que una dictadura fulminante torture a sus presos políticos, sino de que una democracia como la española "ayude a la dictadura cubana para disfrazar la deportación como "liberación". Es algo que se podría esperar de los hombres fuertes en Myanmar, Corea del Norte e Irán". Además, arremete contra "el papel moralmente en bancarrota interpretado por el gobierno socialista del presidente de gobierno español".
También le llueven críticas al predecesor de Trinidad Jiménez, por ayudar al lavado de imagen de la dictadura castrista, con el exilio de los presos: "El régimen necesitaba no solamente sacar los prisioneros del país, presentando ese paso como una "liberación" sino también asegurar que serán olvidados. España aceptó ayudar y ¿por qué no? El entonces ministro de Relaciones Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, tenía una cálida relación con el gobierno de Castro y era un frecuente huésped VIP en la isla", asegura.
Para el WSJ, "Zapatero ha traicionado al pueblo cubano" porque ha impedido a los cubanos a erigirse en nuevos líderes de su país, y negándoles la solidaridad internacional "con la libertad en el extranjero".