Ibarra compara la propiedad intelectual con las fregonas y las maletas de ruedas
Juan Carlos Rodríguez Ibarra arremete en El País contra los "artistas" y sus lamentos sobre "el daño que hace la piratería a sus creaciones". Ibarra asegura que estas reclamaciones sobre propiedad intelectual, le "chirrían" igual que si lo hiciera el inventor de la fregona o de la maleta de ruedas.
El ex presidente de la Junta de Extremadura confiesa en un artículo en el El País, su hartazgo de los artistas que se manifestaron frente al Ministerio de cultura, para quejarse de la precaria situación que atraviesan.
Para tratar de desmontar sus argumentos, Ibarra establece una comparación, cuanto menos, curiosa: "¿le corresponde algún tipo de propiedad intelectual al inventor de la fregona y al inventor de la maleta de ruedas? Sus creaciones no surgieron de la nada, puesto que unieron dos cosas que ya existían y que, antes que ellos, alguien inventó. Y siguiendo el razonamiento, seguro que antes del de la rueda o del de la maleta, del trapo o del palo, ya hubo alguien que inventó algo que sirvió para que esos artilugios pudieran mezclarse" se pregunta.
Este argumento, asegura al ex presidente autonómico "permite discutir, cuando no negar, la propiedad intelectual" por lo que "resulta chirriante escuchar a algunos creadores musicales y cinematográficos españoles cuando hablan, hasta la náusea, de sus creaciones y de su propiedad intelectual, dañada, según ellos y la SGAE, por la piratería informática".
Tampoco la SGAE se libra de sus críticas, y de su irónico razonamiento. Ibarra asegura estar en un parque escribiendo y mirando una escultura, y cómo recuerda "las cosas que dijeron algunos creadores". "Siguiendo sus razonamientos sobre los derechos de autor y la propiedad intelectual, alguien debería venir a cobrarme unos euros por estar disfrutando del espacio que un arquitecto creó y por mirar la escultura que un escultor ideó y modeló.
Además, deja una nueva perla para la sociedad de Teddy Bautista: "No diré cuántas veces he mirado la escultura, no vaya a ser que la SGAE me denuncie por haber mirado más veces de las que podría ser entendido e interpretado como un acto de piratería visual".
La solución del polémico asunto, para Ibarra pasa por aceptar que "por juntar palabras que no son nuestras o por unir imágenes que tampoco lo son, se tenga derecho a recibir algún tipo de remuneración en forma de lo que se conoce como derecho de autor" pero no de la manera actual. Además, le pregunta directamente a Ángeles González Sinde: "¿Cuánto tiempo calcula la Ministra de Cultura que iban a tardar en aparecer mil páginas en Internet por cada una que cerrara una comisión ministerial o un juez?".