La conexión entre Podemos e Irán preocupa no sólo en España, sino a nivel internacional y para saber un poco más nos reunimos con Gabriel Ben Tasgal, argentino de nacimiento, israelí y uno de los mayores expertos en terrorismo yihadista y en Oriente Medio que viaja casi permanentemente, ofreciendo conferencias y, sobre todo, dando cursos al más alto nivel entre fuerzas de seguridad de varios países europeos, entre ellos España.
Hablar con Ben Tasgal es siempre estimulante: pocas personas conocen como él el mundo del radicalismo islámico y aún menos hablan con la franqueza –"entre amigos hay que ser sinceros"- con la que él expone los problemas a los que Occidente se enfrenta en Irak y Siria, en París, en Bruselas, en Orlando o, por supuesto, también en España.
De hecho, España ocupa la mayor parte de nuestra conversación en una agradable mañana de junio, soleada y con brisa, unos días antes de unas elecciones que, por supuesto, son un motivo de inquietud o incluso de preocupación.
Una inquietud que comparte Ben Tasgal y que obedece, obviamente, al ascenso y la posible llegada al poder de Podemos: "Como israelí y, sobre todo, como alguien que quiere que las relaciones entre España e Israel sean aún mejores, me preocupa mucho que puedan llegar al poder".
Irán, el terrorismo y la compra de políticos
Irán es la principal razón de esta preocupación: Ben Tasgal nos recuerda que "según cientos de informes de inteligencia internacionales" el país de los ayatolás es "el principal promotor de atentados terroristas en el mundo", además de "culpable directo" de atentados en Sudamérica como el de la AIMA en Buenos Aires, que costó 85 vidas.
Por eso a nuestro interlocutor le llama poderosamente la atención "que Pablo Iglesias haya dicho que para combatir el terrorismo hay que hacerlo a través de alianzas internacionales, pero ¿cómo puede proponer algo así cuando él personalmente y su partido reciben dinero de Irán?", se pregunta. "Él, que se acuesta con Irán para que me entendáis, después viene a dar lecciones sobre combatir al terrorismo, él que es aliado de un atentado terrorista.
Y es que táctica de Irán para expandir su influencia ha cambiado en los últimos años: "No hace falta transformar a todo el mundo en chiítas, basta con conseguir líderes políticos en los países en los que quieren penetrar que hablen en nombre de Irán y que sean los portavoces de la ideología de Irán".
No es una idea teórica, ya ha ocurrido en la práctica: "Lo han hecho adoptando un país entero y a muchos de sus mandatarios, Venezuela, pero también a través de políticos concretos como Luis D’Elía, en Argentina, que según el juez Daniel Rafecas recibía y recibe dinero de Irán". D'Elía es un líder sindical y de izquierda –un piquetero- que, de hecho, estaba también implicado en el encubrimiento del atentado de la AMIA e incluso viajó a Teherán a pedir perdón al régimen de los ayatolás cuando en Argentina se descubrió su vinculación con la masacre.
"Si yo quiero penetrar en un país –sigue Ben Tasgal-, no hace falta dominarlo todo, me basta con colocar a dos o tres políticos de baja integridad moral y pagarles para que digan lo que yo quiero". En este sentido, "es extremadamente sospechoso que Iglesias y Podemos hayan recibido el dinero que han recibido de Irán a través de una televisión como HispanTV, sólo por hacer un programa que no deben verlo más que unos pocos cientos o miles de personas".
En resumen, para Ben Tasgal está claro que "lo que ha hecho Irán en Venezuela y lo que ha hecho con D’Elía también lo ha hecho aquí, y eso es preocupante".
Un vínculo que demuestra "la poca integridad moral" de Pablo Iglesias, que "permite que un estado como Irán penetre en España, que se alía con ese país a pesar de las ejecuciones de homosexuales y la violación de derechas de las mujeres".
Y es una relación que ya está beneficiando a un Irán "que ve que ha invertido en un político que lo que ha hecho es promover y aprobar mociones antisemitas que violan la constitución Española en los ayuntamientos que domina y en los que está la CUP". Además, si llegasen al gobierno "y España se aísla de la lucha contra el terrorismo y no forma parte de ella quién sale beneficiado es, obviamente, Irán".
Ben Tasgal, además, alerta de que el antisemitismo que se promueve con cosas como el movimiento BDS o ciertos puntos de vista sobre Israel "no sólo atenta contra Israel o los judíos, lo que hace es corroer los valores de las sociedades. Cuando tú permites la penetración del antisemitismo la sociedad lo termina pagando en un montón de aspectos más", asegura.
¿Una alianza contra natura?
Nuestro interlocutor cree que "un radical islámico se siente muy cómodo y seguro con ciertas cosas que podrían ocurrir con un gobierno de Podemos" y, por supuesto, "un país como Irán también se sentiría extremadamente cómodo con ese gobierno". Sin embargo, es difícil saber qué consecuencias podría tener porque, "al fin y al cabo, hay que reconocer que España no ejerce un papel de liderazgo en la UE".
Pero, ¿como es posible esa alianza entre una dictadura teocrática y un partido que se reclama muy de izquierdas y parte de la modernidad? Gabriel Ben Tasgal nos lo explica: "Con la caída del bloque soviético y el derrumbe ideológico del comunismo tras su fracaso, éste se transformó en el postmodernismo, su ideología había fracasado pero decían que todas las ideologías habían fracasado". Son estas fuerzas postmodernistas las que "se alían con fuerzas premodernistas en contra de la modernidad, de las sociedades libres que conocemos".
Aparentemente, estás ideologías premodernistas como el islam radical "no tienen ninguna relación con las postmodernistas", pero sí tienen una importante cosa en común: "Los dos quieren cambiar radicalmente el orden establecido", y para ello no tienen ningún reparo en aliarse entre ellos en un pacto aparentemente contra natura.
En el caso que nos ocupa "la alianza de Podemos e Irán es en contra de todos los valores que representan partidos como el PSOE, el PP o Ciudadanos", es decir, aquellos "que intentan mejorar la sociedad pero manteniendo las cosas buenas que se han logrado y, sobre todo, respetando la ley".
A esta "conexión ideológica" hay que sumar "una conexión táctica: por ejemplo la participación de personas de extrema izquierda –tanto de Podemos como de la CUP- no sólo en flotillas a Gaza sino en un montón de actividades cuyo fin último es explicar y dar cabida a los puntos de vista de Hamas" -que recordemos que tiene en Irán a su principal soporte- y también la colaboración económica de la que ya nos ha hablado Ben Tasgal.
Sin embargo, todo se puede resumir en una ecuación bastante simple: "Uno paga y otro hace el trabajo", nos explica nuestro interlocutor recordando una vez más el caso del piquetero D’Elía: "Es muy sencillo: Irán paga y él ejecuta, ¿por qué debería ser diferente en España?" se pregunta con una sonrisa que es toda una respuesta.