Terroristas talibán han atentado este viernes en los alrededores de la embajada española en Kabul. El ataque ha comenzado sobre las 18:00 hora local en el área de Sherpor, en la que se ubican diversas embajadas -entre ellas la española- y edificios gubernamentales, cuando tras una explosión en un coche un grupo de terroristas suicidas penetró en un hostal cercano a la delegación de España y utilizado habitualmente por personal extranjero.
Según anunció el presidente del Gobierno en un mitin desde Orihuela, un policía español murió en el ataque. El anuncio sorprendió porque minutos antes, el propio Rajoy había informado de que sólo había un policía herido de levedad, y que el resto de la delegación estaba a salvo. El presidente recibió la información de Interior en pleno acto electoral, lo que le obligó a rectificar.
El fallecido es, según informa Interior, el agente del que se había informado que estaba herido. Fuentes consultadas por LD indican que el policía murió de camino al hospital. El Gobierno ha dado después su nombre: se trata de Isidro Gabino San Martín Hernández, de 48 años y natural de La Bañeza (León). El agente estaba destinado en Kabul desde septiembre de 2014 y pertenecía a la novena UIP con destino en Oviedo. Estaba casado y tenía cuatro hijos.
Coche bomba
En su comparecencia anterior, el presidente afirmó que no se trataba de un atentado contra la embajada de España sino contra la casa de huéspedes colindante. Poco antes, desde el Ministerio de Exteriores se había dicho que la embajada era el objetivo del ataque.
Según la BBC, que cita a fuentes de seguridad, el ataque fue obra de siete atacantes. El modus operandi empleado fue, como en otros ataques similares de los talibán, un coche bomba al que ha seguido el asalto de los terroristas al edificio.
En conversación informal con los periodistas, Rajoy ha informado de que la embajada de España fue alcanzada en su parte trasera por la onda expansiva de la explosión. Los terroristas buscaban ciudadanos estadounidenses en el hotel objetivo del ataque, según fuentes de Inteligencia.
Fuentes conocedoras de los hechos añadieron que los talibanes no encontraron a nadie en el hostal y entraron después en la embajada española puesto que la explosión hizo que saltara el portón de entrada por el que accedían los vehículos. El policía fallecido estaba vigilando dicho acceso. Además del agente español, murieron otros dos policías afganos que también hacían labores de seguridad en el perímetro de la embajada.
Dentro del complejo diplomático había aproximadamente unas 10 personas, entre personal español y afgano. Tras el asalto, se refugiaron en un búnker preparado para guarecerse y la azotea de uno de los edificios que componen las instalaciones españolas.
Los talibán fueron abatidos
Las fuentes consultadas por Europa Press relatan que posteriormente, tanto Fuerzas Americanas como de la Policía afgana entraron en la embajada abatiendo a los talibán que había dentro. Al parecer, fallecieron tres de ellos. La operación continúa abierta, según ha informado José Manuel García Margallo.
Pocos minutos después de que se conociera el ataque, los talibán asumieron su autoría mediante un comunicado en internet. A través de un mensaje en Twitter, su portavoz, Zahibulá Muyahid, indicó que el atentado ha sido obra de un suicida y ha dejado numerosas víctimas. "La guerra sigue a buen ritmo", subrayó.
La embajada española de Kabul está custodiada por agentes de la UIP (Unidad de Intervención Policial), del Cuerpo Nacional de Policía y no tiene distintivos en el exterior que la identifiquen. En la actualidad, la embajada cuenta con poco personal. Así por ejemplo, no tenía ni consejero ni agregado del ministerio de Interior.