La cadena de explosiones se produjo en el puerto de contenedores, con productos inflamables, de la ciudad china de Tianjin. Las primeras informaciones hablaban de numerosas víctimas y el canal CCTV informaba además de que parte de la ciudad se ha quedado sin luz.
Según el diario oficial Beijing News, al menos 42 personas murieron por la deflagración. El responsable de los servicios funerarios del Hospital Teda de Tianjin dijo a ese periódico que el centro sanitario ya ha recibido 42 cadáveres procedentes del lugar del suceso, aunque las autoridades aún no han confirmado esa cifra.
La agencia oficial Xinhua y la televisión estatal CCTV habían contabilizado previamente al menos 17 muertos, 40 desaparecidos y más de 400 heridos.
Entre los heridos, 32 se encuentran en estado grave y otros 283 están ingresados y en observación en los hospitales locales, según el Gobierno municipal de Tianjin citado por Xinhua.
Aunque las causas del suceso se desconocen por el momento, las informaciones facilitadas por el Departamento de Bomberos de Tianjin apuntan a que las explosiones se produjeron después de que se declarara un incendio en el almacén.
El Departamento de Bomberos de Tianjin afirmó que el incendio comenzó a ultima hora del miércoles y que se produjeron dos grandes explosiones con 30 segundos de diferencia, seguidas de otras menores.
El Centro de Redes de Terremotos de China indicó que el segundo estallido, el que causó mayores daños, fue equivalente al provocado por unas 21 toneladas del explosivo TNT.
Según informaciones de las autoridades locales y relatos de vecinos citadas por ese medio oficial chino, las explosiones destrozaron ventanas y puertas, sacudieron edificios de apartamentos y la gente tuvo que ser trasladada a la calle. La onda expansiva de las explosiones llegó a sentirse hasta a diez kilómetros de distancia.
El presidente de China, Xi Jinping, y el primer ministro, Li Keqiang, han instado a hacer todos los esfuerzos para salvar a los heridos y minimizar en la explosión de Tianjin, según la agencia oficial.
El suceso se produjo en un almacén del área empresarial y logística de Binhai, un importante núcleo industrial de Tinajin, ciudad de alrededor de 15 millones de habitantes que se encuentra a unos 120 kilómetros de Pekín.