Era medianoche cuando las dos principales cadenas de televisión marroquíes (Al Aoula y 2M) emitían un comunicado real. En él, el rey Mohamed VI decía no haber "sido nunca informado de la gravedad de los crímenes abyectos" del español Daniel Galván Viña, que figuraban en la lista de personas indultadas por Palacio con motivo de la Fiesta del Trono.
El pederasta español, a quien los medios locales atribuían su pertenencia al CNI el pasado viernes, estaba condenado a 30 años de cárcel por abusar de 11 niños en Kenitra. Unos crímenes, de los que el monarca alauí decía no tener constancia.
Además, este comunicado marcaba el anuncio de la apertura de una investigación que tendrá consecuencias para los implicados en el error y señala que ha pedido al Ministerio de Justicia que proponga reformas en los procedimientos propios del indulto por el día de la Fiesta del Trono.
Según algunos medios con presencia en la zona destacan que los marroquíes han adoptado este comunicado con cierta decepción porque el monarca no haya pedido disculpas.
De momento, unas 60 personas han resultado heridas en las protestas por el indulto del pederasta español en las calles de Rabat. Según destaca el diario El Mundo, la Casa Real marroquí sopesó la posibilidad de pedir a España que el pederasta terminara en una cárcel española los 28 años de condena que le quedan por cumplir, pero al final lo descartó.