El presidente venezolano imita en casi todo a Hugo Chávez aunque no tenga la misma llegada con la gente. Una de las costumbres que tomó del líder chavista son las interminables cadenas nacionales obligatorias que emite cada semana a través de todos los medios de comunicación venezolanos y que provoca grandes pérdidas de ingresos.
Infobae, que cita como fuente a la ONG Monitoreo Ciudadano, señala que Nicolás Maduro estuvo en los últimos siete meses y medio, es decir desde el inicio de 2014, 120 horas y 51 minutos en cadena nacional con uno de sus acostumbrados discursos. Esto equivale a un total de 7.251 minutos, lo que multiplicado por el costo por el minuto de publicidad en televisión en Venezuela, da un total de 240 millones de dólares, o lo que es lo mismo casi 180 millones de euros.
Esa cantidad de horas sólo se refiere a las apariciones de Maduro ya que si se suma toda la publicidad gubernamental, con las llamadas "notipatrias", los resúmenes de las cadenas, los espacios institucionales, además de las películas y las transmisiones en vivo, se llega hasta las 300 horas.
Andrés Cañizález, coordinador de la ONG, señala que "Si Maduro o su gobierno tuvieran que comprar el tiempo al aire, tendría que pagar altísimos costos. Éste es un tema que lamentablemente se ha vuelto cotidiano, y ni siquiera los opositores lo ponen sobre la mesa de discusión. Pareciera que la gente se acostumbró a una práctica violatoria de los derechos, algo que es preocupante".
Por su parte, en declaraciones a la cadena colombiana NTN24, el diputado opositor Carlos Berrizbeitia señaló que "es una grosería. El pueblo venezolano está pasando una gravísima crisis económica (…) y este señor mediáticamente piensa que va a bajar la inflación y que va a resolver el problema".