Venezuela pasó este martes una larga jornada en la que los estudiantes y ciudadanos opuestos al régimen chavista respondieron a la convocatoria del líder opositor Leopoldo López, quien se entregó a la Justicia venezolana para cumplir así con la promesa hecha el pasado domingo.
Tras ser detenido por los miembros de la Guardia Nacional, el líder del partido político Voluntad Popular (VP) fue trasladado en helicóptero al Palacio de Justicia. Desde ahí fue llevado al Centro de Procesados Militares de Ramo Verde, ubicado en la localidad de Los Teques, en el estado de Miranda, cerca de la capital. Una de las informaciones que más ha sorprendido es que López estuvo acompañado por el presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, quien incluso lo llevó a la mencionada cárcel a petición del propio Nicolás Maduro.
Durante un discurso este mismo martes, el presidente venezolano recordó que habían descubierto un plan de la ultraderecha para asesinar al líder opositor y en tono irónico dijo: "Para que ustedes vean qué hace una revolución para garantizar la paz, nosotros terminamos cuidando la vida de Leopoldo López". Agregó que "nosotros terminamos cuidando su vida y sé que sus padres saben que salvamos la vida del hijo".
Según los medios de comunicación, la decisión del traslado a dicha cárcel fue tomada por la jueza 16 de Control de Caracas, Raleyns Tovar Guillén, quien también fijó para este miércoles la primera audiencia en la que se decidirá si el opositor ingresa en prisión preventiva. Durante ese tiempo, el Ministerio Público investigará si estuvo implicado en la violenta jornada del miércoles 12 de febrero, y por la que el Gobierno de Maduro pidió que fuera detenido. López se enfrenta a los delitos de "incendio intencional, instigación pública, daños a la propiedad pública y privada; y asociación para delinquir".