El presidente de Venezuela parece creer que existe una enorme conspiración contra su país, no sólo desde gobiernos que según él son enemigos, sino también desde empresas como Twitter, el último objetivo de sus críticas.
Todo comenzó cuando acusó a la red social de desaparecer unas 6.600 cuentas, entre ellas muchas de sus ministros, y borrar miles de seguidores de su cuenta personal: "Pretenden manipular y monopolizar las redes sociales y las nuevas formas de comunicación. ¡Vamos a liberarlas, que sean verdaderamente libres, que todo el mundo se comunique por ahí sin que los espíen, en primer lugar!".
Por eso, Nicolás Maduro anunció que propondrá la creación de una red social regional propia por la "barrabasada" cometida por parte de Twitter: "Fue un ensayo la barrabasada que hicieron. Yo propongo que vayamos formulando una propuesta para hacerla oficial en el ALBA (Alianza Bolivariana para América), en la UNASUR (Unión de Naciones Suramericanas) y en el Mercosur (Mercado Común del Sur), en la cumbre de diciembre en Caracas", para crear esa red.
Preocupaciones "de una quinceañera"
Ante esa nueva "idea" de Maduro –quien el sábado adelantó la Navidad para dar "felicidad suprema"–, el opositor y dirigente de la agrupación Voluntad Popular, Leopoldo López, criticó al presidente por tener preocupaciones "de una quinceañera que piensa en que tiene o no tiene cuántos seguidores en Twitter". "Me parece una ridiculez que un presidente que está manejando una crisis del tamaño de la que se está viviendo en Venezuela (…) esté preocupado porque está perdiendo seguidores", apuntó en declaraciones que publica el diario El Tiempo de Venezuela.
Por su parte, el líder opositor, Henrique Capriles, apuntó que Maduro se preocupa más de Twitter que de la inflación y la inseguridad. En su cuenta de la red social señaló que "a Maduro no le preocupan los homicidios, ni la inflación, ni la escasez, ni los hospitales, sino perder seguidores en Twitter, ¡qué vergüenza!".
Además, el excandidato a la presidencia, en la población de Calabozo, en el estado Guárico, se preguntó si "será que de verdad se tragó un pajarito que no lo deja pensar. Eso es una falta de respeto. Aquí asesinan miles de personas a diario, hay lugares donde por semana no llega una gota de agua y él está pendiente del Twitter".