Nicolás Maduro ha implantado en Venezuela cartilla de racionamiento, sin necesidad de disfrazarla al estilo chavista, llamándola "cédula del buen vivir". El nuevo presidente bolivariano ha decidido combatir el grave desabastecimiento que sufre el país -donde cada día es más difícil encontrar productos básicos como papel higiénico o leche- a la manera cubana. Esta decisión llega después de que Maduro culpara a la oposición de "acaparar y hacer desaparecer productos" para derrocarlo, y de aseverar que no había suministros de papel sanitario porque "la gente está comiendo de más".
Según el diario venezolano Panorama, el racionamiento va a institucionalizarse en los próximos días, y en lugares como Maracaibo (Zulia) ya es una realidad. El secretario del Gobierno Blagdimir Labrador ha señalado el 10 de junio como la fecha de inicio de distribución de las cartillas, que se repartirán en 65 supermercados de municipios de Maracaibo y San Francisco, a modo de "proyecto piloto".
"El sistema va a registrar la adquisición del rubro en un establecimiento y evitará que el mismo usuario adquiera el mismo producto, el mismo día, en otro expendio de alimentos", explicó. "Habrá rubros que podrán adquirirse al siguiente día, pero el mismo sistema determinará el periodo de tiempo para que se pueda comprar de nuevo el rubro. Sabemos que hay productos que duran más de un día", explicó el secretario gubernamental venezolano.
El Gobierno de Maduro establecerá un consumo mensual medio de las familias venezolanas, y "según la periodicidad que nosotros establezcamos" cada persona no podrá adquirir más de "20 rubros regulados".
Ante el gravísimo desabastecimiento que sufre el país, muchos venezolanos están diseñando alternativas para encontrar los suministros que necesitan sin tener que recorrer uno por uno todos los supermercados. La aplicación para móviles Android llamada "Abastéceme" registra los alimentos disponibles en los establecimientos a través de un "mapa virtual".