Alberto II ha firmado este domingo, en el día de la fiesta nacional de Bélgica, el acta de abdicación. La ceremonia, a la que no han sido invitadas las otras casas reales, comenzó con la asistencia de toda la familia real a una misa Te Deum en la catedral de San Miguel y Santa Gúdula, en el centro de la capital y que también fue el escenario de la boda de los próximos reyes, Felipe y Matilde.
Después tuvo lugar la ceremonia de abdicación del rey Alberto II, que pronunció un breve discurso, al igual que lo hizo el primer ministro, el socialista Elio Di Rupo, para después firmar el acta de abdicación como rey de Bélgica, junto a los testigos.