Las subidas más duras en el ciclismo

Rampas kilométricas, con pendientes imposibles y algunas incluso sin asfaltar. Así son las subidas más dura del ciclismo mundial.

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Alpe d'Huez

Es una de las subidas más míticas del ciclismo y del Tour de Francia gracias a sus 21 curvas de herradura. Supera un desnivel de 1073 m tras 13,1 km de subida, con una pendiente media del 8,2% y una máxima del 11,5%

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Cauberg

Apenas son 1200 metros de subida que se ven cada año en la clásica Amstel Gold Race o, como en la foto, en el mundial disputado en 2012. En ese pequeño tramo, al 5'8% de media y una máxima del 12%.

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Galibier

El encadenado Télégraphe-Galibier es uno de los más duros y temidos por el pelotón del Tour de Francia. Tiene un pequeño descanso intermedio, incluso en descenso, lo que hace que su media baje al 5'5%. Pero subiéndolo seguido son 35 kilómetros, con rampas máximas del 15. Además de que suele ser el puerto más alto del Tour cuando se sube.

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Hautacam

Otro de esos puertos que hacen temblar las piernas de los ciclistas. 16'3 kilómetros de infernal subida con una media al 7'5% y una máxima no muy alta, del 12, pero sostenida.

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Kapelmuur

Kapelmuur o el muro de la capilla, que se ve al fondo. Es una pendiente de apenas 475 metros, pero con el suelo adoquinado. Se sube en la clásica belga del Tour de Flandes, con una pendiente media en ese tramo del 9'3% y una máxima del 19'8. Una auténtica pared. Un muro.

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Los Lagos de Covadonga

Esta subida al puerto asturiano ya entra dentro de la mitología y la leyenda de la Vuelta a España. Son 14 kilómetros de interminables subidas, que es más suave en su final. Tiene una pendiente media del 6'87% y sus tramos más duros los encontramos en La Huesera, esa recta de 800 metros entre el 12 y 15%; y el Mirador de la Reina, entre el 14 y el 15. Para sufridores.

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Mortirolo

El coloso de los colosos. El que más miedo da en Italia. Carretera rugosa, flanqueado por altos árboles y rampas de infarto. Son más de 12 kilómetros de subida con una pendiente media de casi el 10'4% y tramos que llegan al 18. Ésa es la más conocida, aunque en el 2012 se subió por otra vertiente, la de Tovo Sant'Agata de 12'2 al 10'7%.

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Muro de Huy

Pensar en rampas del 26% duele. Y subirlo mucho más. Por suerte para los ciclistas, son sólo 1.300 metros de subida que se realizan en la clásica belga Flecha Valona, con una media del 9'3.

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Stelvio

El techo de los Alpes orientales con sus más de 2.700 metros y sus interminables 21 kilómetros de escalada. Al subirse en el Giro, en mayo, es frecuente que la nieve rodee la carretera. Una subida que tiene una pendiente media del 7'12% y una máxima del 14%, pero que duele de ver tanta curva.

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Zoncolan

Otra de las duras subidas que hay en el Giro de Italia. Tiene dos vertientes, siendo la más dura la de Ovaro, aunque más corta. Serían 10'5 kilómetros con una pendiente media brutal del 11'5% y rampas máximas del 20. Terrible.

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Finestre

Lo disfrutamos (o sufrimos desde casa) en el último Giro de Italia, con los ataques de Landa y Aru, en la imagen, a Contador. Son más de 18 kilómetros, de los cuáles, los últimos 8 ni siquiera están asfaltados. La pendiente media es del 8'81% y su máxima, al principio de la subida, es del 14. Pero sin asfaltar, rugoso, con arenilla... Una locura.

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Angliru

Este coloso asturiano es, posiblemente, el puerto más duro que hay en España. Son más de 12 kilómetros de subida con una pendiente media de 10'6%. Realmente empinado, pero que todavía lo es más con esa rampa máxima del 23'5% en la zona de La Cueña les Cabres.

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Tourmalet

Casi sin lugar a dudas, es el puerto de montaña con más solera del Tour de Francia. Tiene 23 largos kilómetros, con una primera parte más sencilla y que poco a poco se endurece en su parte final. Tiene una pendiente media del 6'33% y una máxima del 13 en sus kilómetros finales.

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Les Lacets de Montvernier

Cuando se habla de escalar una montaña en ciclismo, es con esta imagen cuando tiene sentido. Esta subida, en los Alpes franceses, es un pequeño puerto de tan solo 3 kilómetros. Está en el Tour de este 2015, en la 18ª etapa. La subida tiene 17 curvas de revuelta, con un pendiente media del 8,2%.