Perplejos. Así aseguran fuentes del grupo parlamentario a Libertad Digital que se encuentran en JxCat. Los de Carles Puigdemont defienden que se daban " todas las condiciones políticas para hacer el pleno de investidura hoy mismo" y denuncian abiertamente que el presidente del Parlamento autonómico, Roger Torrent no les "haya consultado ni comunicado su decisión" de aplazar el pleno antes de comparecer en la cámara catalana. En ERC aseguran que Torrent ha llamado hasta cinco veces a Puigdemont pero éste no le ha cogido el teléfono.
Con su decisión, Roger Torrent ha conseguido librarse de responsabilidades penales siguiendo además la orden que en las últimas horas ha salido de su propio partido, que ayer reunía a su dirección encabezada por Marta Rovira y el propio Torrent y de donde salió el compromiso de no empezar la legislatura desobedeciendo las resoluciones del Constitucional.
En Junts per Catalunya no entienden esta decisión, aunque valoran que al menos Torrent haya respetado la candidatura de Carles Puigdemont y no haya anunciado una nueva ronda de contactos. La pelota está ahora en el tejado del expresidente, una vez se pronuncie nuevamente este martes el Tribunal Constitucional, Puigdemont deberá aclarar sus intenciones si quiere mantenerse como candidato.
La CUP también ataca a Torrent
El anuncio de Torrent tampoco ha gustado nada a los radicales de la CUP. El portavoz del grupo, Carles Riera, se ha apresurado en su cuenta de Twitter para recriminar al presidente del Parlamento que "la democracia no se aplaza" y que, por lealtad a los resultados de las elecciones del 21 de diciembre, "es necesario que el pleno se celebre hoy, ninguna concesión al Estado". También la ANC ha decidido mantener las concentraciones que había convocado para este martes a la hora del debate de investidura, la principal, a las puertas del Parlamento de Cataluña.