Preocupación por el posible resultado de las elecciones de este jueves. Muchos nervios a puerta cerrada. "Puede pasar cualquier cosa", resumió un miembro de la dirección nacional tras chequear las últimas encuestas internas. Mariano Rajoy seguirá el devenir electoral desde Génova junto a su núcleo duro y Xavier García Albiol lo hará en un hotel de Barcelona tras votar en Badalona. Al día siguiente, el presidente ha convocado al Comité Ejecutivo, al que asistirán los barones regionales de la formación. "Confiamos en ti, España confía en ti", le trasladó Cristina Cifuentes, dejándole claro su respaldo pase lo que pase.
La percepción en el entorno de Rajoy es que las encuestas son poco fiables y todo está en el aire. Las formaciones independentistas no estarían lejos de acariciar la mayoría absoluta, según sus últimos sondeos, que recogerían un estancamiento de Ciudadanos. Si bien, una y otra vez, las fuentes consultadas repitieron que bailan escaños y que con tantos indecisos es muy difícil hacer proyecciones fiables.
Los interrogantes también se multiplican con respecto al posible resultado de Albiol. En el PP parten de la base de que será un resultado muy malo, pero aspiran a salvar los muebles. El problema, según adujeron, es que pueden pasar de 9 a 6 escaños por un puñado de votos. Perder el grupo parlamentario propio –esto es, sacar menos de 5 representantes– es algo que el candidato no contempla, según su equipo de colaboradores.
En este contexto, Rajoy protagonizó la tradicional cena de los populares madrileños, que se celebró en Las Rozas. "Hoy no se hace campaña y nosotros cumplimos la ley", afirmó, pero no dudó en hablar de Cataluña en plena jornada de reflexión. "Hay algunas cosas que conviene dejar claras", dijo. "Este partido va a defender siempre la unidad de España" como también "el estado de derecho y el imperio de la ley", arguyó. Y sacó pecho: "Ahora hay elecciones en Cataluña y las hay después de aplicar el 155. Esas elecciones las ha convocado el presidente del Gobierno de España porque otros no quisieron hacerlo".
Una respuesta del Ejecutivo que, a ojos del presidente, debe hacer reflexionar a los independentistas. "Ya hay algunas enseñanzas que van a estar ahí, en el futuro, para siempre. España es una nación que tiene instrumentos para defenderse" y "todos estamos bajo el imperio de la ley", razonó. Como ejemplo, la situación hoy de los políticos promovieron el golpe separatista. "Los gobernantes ya saben que se puede hacer y lo que no se puede hacer. Ya saben lo que pasa cuando se hace lo que no se puede hacer", zanjó, provocando la ovación de los suyos.
Antes, Cifuentes quiso escenificar que Rajoy tendrá al PP de Madrid detrás, pase lo que pase. "Tenemos un grandísimo presidente. Un presidente que defiende con firmeza los valores del PP", afirmó. "Por eso te queremos y te apoyamos y por eso hoy estamos más que nunca a tu lado", llegó a destacar la líder de una de las estructuras más importantes de la formación. En clave interna, Rajoy también lanzó un mensaje importante ya al final de su intervención: "Aquí todo el mundo hace pronósticos pero luego pasa lo que tiene que pasar". Esto es, prietas las filas porque, de cara a los comicios de 2019, las cosas irán bien. "En esta historia que estamos viviendo, nosotros estamos en el lado bueno", remató.