La candidatura de Inés Arrimadas sería la más votada en las próximas elecciones, según la encuesta que ha hecho pública el CIS este lunes. Ciudadanos tendría un 22,5% de los votos, casi dos puntos por encima de ERC, que estaría en segundo lugar. Sin embargo, esto sólo les permitiría empatar en escaños con los de Junqueras: ambos tendrían 32 diputados.
El CIS también confirma la subida que apuntan las últimas encuestas para Junts per Catalunya: la lista de Puigdemont tendría un 16,9% de los votos y 25 o 26 escaños. Esta cifra no permitiría a los separatistas tener una mayoría absoluta ya que incluso con los 9 diputados de la CUP se quedarían, en el mejor de los casos, en 67 escaños, uno por debajo de los 68 que garantizan el control de la cámara regional catalana.
En el otro bloque la subida de Ciudadanos se vería acompañada también por una fuerte subida del PSC, que llegaría al 16% y tendría 21 diputados; pero con una caída estrepitosa del PP, que con sólo el 5,8% de los votos sería el partido más pequeño del Parlament y sólo tendría siete escaños. En conjunto, los constitucionalistas estarían muy lejos de la mayoría: como mucho tendrían 60 diputados.
Mal resultado tendría también Catalunya en Comú-Podem, la candidatura patrocinada por Podemos y Colau tendría un 8,6% de los votos, algo menos de los que obtuvo en el 2015, lo que significaría que perderían dos diputados respecto a los 11 que tienen actualmente. No obstante, estos nueve diputados podrían resultar claves en la formación del nuevo gobierno.
Empate entre separatistas y constitucionalistas
La encuesta señala un empate prácticamente a la décima entre los partidos abiertamente separatistas y los en teoría constitucionalistas. Los primeros perderían tres puntos y medio respecto a su resultado conjunto en 2015: la suma de ERC, Junts per Catalunya y ERC pasa del 47,8% al 44,4%. En el otro bloque, la suma de Ciudadanos, PSC y PP pasa del 39,1% al 44,3%.
La encuesta ha contado con 3.000 entrevistas -una cifra muy alta para la población de Cataluña- de las cuales 1.200 se han realizado en Barcelona mientras que en las restantes provincias se han hecho 600. El trabajo de campo se desarrolló entre los días 23 y 27 del pasado mes de noviembre.
¿Una participación histórica?
El sondeo apunta dos datos interesantes: el primero que la participación podría ser elevadísima: el 90% de los encuestados asegura que votará "con toda seguridad" y otro 5% responde que "probablemente sí".
Además, un porcentaje notable de los ciudadanos que afirman que están decididos a votar por el contrario no tienen claro por qué partido lo harán: un 29% de ellos se encuentra en esa tesitura, lo que supone una bolsa de voto que podría volcar lo previsto por este y otros sondeos.
Cataluña mal, pero Puigdemont mejor
Resulta también reveladores las respuestas a algunas preguntas sobre la situación en Cataluña y las conclusiones que se extraen de ella. En general tanto la situación económica como la política se perciben negativamente: el 66% considera que la situación económica es regular, mala o muy mala. Además el 48,5% cree que es peor o mucho peor que hace dos años.
Aún más contundentes son los datos por lo que se refiere a la situación política: el 90% la califica como regular, mala o muy mala y casi un 75% dice que es peor o mucho peor que hace dos años.
Sin embargo, la gestión de la Generalidad es valorada como buena o muy buena por el 38,9% de los encuestados, ligeramente por encima del 36,1% que la considera mala o muy mala. Y del mismo modo el 41% ve buena o muy buena la gestión de Puigdemont, aunque en este caso sí está por debajo del 42,6% que la califica como mala o muy mala.
El paro y el independentismo, principales problemas
A pesar de la peculiar situación política que vive Cataluña el paro es el problema que más encuestados citan entre sus principales preocupaciones: un 27,6% de los encuestados lo hacen. Por detrás, sorprendentemente o no, está el independentismo, citado por un 14,6%, un porcentaje ligeramente superior que el que tienen la falta diálogo entre la Generalidad y el Gobierno (12,2%), la necesidad de más autogobierno o de autodeterminación (11%), o la aplicación del 155 (10,8%) que son los problemas que superan el 10%.
Sin embargo, si sólo se tiene en cuenta la primera respuesta de cada entrevistado el problema más citado es el independentismo, que con un 13,5% de las respuestas se sitúa muy por encima de los demás.