Estados Unidos es el destino de turismo político de moda en el ejecutivo catalán. Entre abril y mayo, Puigdemont ha cruzado el charco dos veces. En la primera, acompañado por Raül Romeva, el minister de Exteriores de la Generalidad. La segunda fue el viaje relámpago que se saldó con la no-foto con Jimmy Carter. Ahora le ha tocado al vicepresidente autonómico Oriol Junqueras, quien sigue con suma atención los acontecimientos políticos de Cataluña desde Nueva York tras haber visitado Miami.
La agenda de Junqueras no difiere demasiado de la de Puigdemont y consiste en visitas a sedes de empresas catalanas, recepciones con representantes de los catalanes que viven en Estados Unidos y reuniones políticas de perfil bajo. El gran trofeo de Junqueras ha sido una foto con Tomás Regalado, alcalde de Miami City. La prensa soberanista ha destacado el encuentro como una de las cimas de la diplomacia catalana. En la reunión, Junqueras estuvo estrechamente marcado por el cónsul de España, Cándido Creis, lo que contribuyó a redondear el discurso nacionalista sobre la importancia de la "cumbre" con la máxima autoridad de Miami City, que a efectos administrativos vendría a ser como un distrito de Madrid o Barcelona. La "auténtica" Miami es Miami Dade, que engloba a Miami City y cuyo "major" es el republicano Carlos Giménez, quien no tuvo el más leve contacto con la delegación catalana.
Colaboración de Mediapro
La estancia en Miami incluyó además una recepción a la colonia catalana en las instalaciones de Mediapro. En cuanto a la visita a Nueva York, el objetivo de Junqueras es el de sondear la financiación de la administración catalana en los mercados internacionales. A tal efecto, el Barça le cedió sus oficinas en la Gran Manzana, convertidas en embajada de la Generalidad para recibir a cinco representantes de fondos de inversión. No ha trascendido ni el nombre de los representantes ni el de los representados. En cambio se ha dado gran despliegue a que Junqueras y el "embajador" catalán Andrew Davis se han visto con el funcionario del Estado de Nueva York Thomas DiNapoli y Alaina Gilligo, también funcionaria, pero de la ciudad de Nueva York. Y sin "carabina" de Exteriores.
Pese a la distancia, Junqueras no ha perdido ripio de la política nacional, lo que le ha permitido advertir al PNV de que el Gobierno no cumple con sus promesas y que mejor que el concierto vasco será la república catalana. A diferencia de sus comparecencias en público en Cataluña, Junqueras se ha apuntado a la corbata en los actos en los Estados Unidos, tal como se puede apreciar en una de las imágenes difundidas por la Generalidad sobre el acto en los locales de Mediapro en Miami.
"Los catalanes somos gente movida"
El colofón del viaje, de momento, ha sido la asistencia de Junqueras y Jaume Roures al reestreno por un día del documental "Barcelona La Rosa de Foc", un acto en el que el empresario mediático ha mostrado su apuesta por el proceso separatista. Hablando del documental, Roures aseguró que "los catalanes somos gente movida y agitada".
Los "éxitos" de Junqueras, que está previsto que regrese este sábado tras siete días de periplo, han servido para mitigar la decepción del viaje a Marruecos que Puigdemont se vio obligado a cancelar porque ninguna autoridad se avino a recibirlo. La Generalidad, que ha anunciado la inminente compra de ocho mil urnas para celebrar el referéndum, acusó al Gobierno de boicotear la "acción exterior" de Puigdemont y Junqueras así como de "deslealtad".