La dirección nacional del PP contempla distintos escenarios en Murcia para evitar perder el control del Gobierno. En estos momentos, la estrategia de Génova, en coordinación con la estructura regional, pasa por arropar a Pedro Antonio Sánchez y seguir presionando a Ciudadanos para que aguarde a la decisión del juez. "Hay que esperar", insistió Fernando Martínez-Maillo, que mantiene una interlocución permanente con José Manuel Villegas, su homólogo en el partido naranja. "Nuestra postura no ha cambiado", zanjó el coordinador general.
Así las cosas, el respaldo a Sánchez se mantiene intacto actualmente. Pero Maillo quiso precisar públicamente que ese apoyo es a día de hoy. "Vamos día a día", expuso en rueda de prensa al término del Comité de Dirección. Esto es, "no contemplamos en estos momentos un candidato alternativo" al actual presidente de Murcia, según sus propias palabras.
El PP espera que Ciudadanos no se atreva a sumar sus votos a los del PSOE y Podemos. Si no cruza esa línea, Mariano Rajoy ha dado orden de seguir sujetando a Sánchez hasta que el juez se pronuncie. Pero, en caso de un posible acercamiento de la formación naranja a los socialistas –ya fuera para elegir presidente a Rafael González Tovar o para convocar después elecciones–, las alarmas se encenderían en Génova, que quiere mantener el poder en la Región.
En este sentido, fuentes de la cúpula nacional reconocieron que se estudian distintas posibilidades –"dos o tres", precisaron– aunque públicamente se reitere una y otra vez su apoyo a Sánchez. "Nosotros queremos que continúe, vemos improbable que salga la moción, pero obviamente tenemos que analizar las distintas opciones", arguyeron al más alto nivel. Por supuesto, la renuncia del hoy presidente regional sería inmediata si el magistrado, en vez de retirarle la imputación, abre juicio oral. Pero, además, ya no se descarta su caída política en el caso de la moción. "La cosa pinta fea", comentó un líder regional del PP, pendiente de los acontecimientos, en conversación informal con este diario.
Sea como fuere, el PP se dedicó un día más a defender la idea de que "hay que evitar las prisas" toda vez, tal y como recordó Maillo, Sánchez va a pedir el archivo de la causa por el caso Auditorio. "Sería tremendo" que la moción de censura prosperara "y al final resultara que al poco tiempo hay un pronunciamiento clarísimo de la Justicia exculpando a Sánchez", razonó."¿En qué lugar quedaría el nuevo presidente?", se preguntó, para a renglón seguido afirmar que tendría "legitimidad" pero no "autoridad".
El asunto fue abordado en el Comité de Dirección y Rajoy se abonó a la tesis de que sería "terrible" forzar la marcha de Sánchez y que, sólo unas semanas después, la Justicia le diera la razón. Y de ahí que Maillo rehusara dar nombres de posibles candidatos alternativos que, al no estar imputados, sí contarían con el apoyo de Ciudadanos. Noelia Arroyo, la portavoz del Ejecutivo, es sin duda la que tiene mayor proyección nacional junto a Teodoro García, diputado nacional por Murcia. "Que nadie tenga prisa, que algunos parece que tienen mucha", se reafirmó Maillo, que en los últimos días no ha dejado de mantener contactos telefónicos con Villegas, sin llegar a ningún tipo de entendimiento.