Mariano Rajoy quiso dejar bien claro este lunes que Ciudadanos sigue siendo su "socio preferente" por lo que, en consecuencia, descolgará el teléfono para hablar con Albert Rivera cada vez que sea necesario. Si bien, en víspera de la reunión en el Congreso entre ambas formaciones para abordar la limitación de mandatos y los aforamientos, el PP avisó de que el camino será largo, tortuoso y sin un fin claro. Tanto que Fernando Martínez-Maillo recordó que serían necesarias reformas legislativas e, incluso, retocar la Constitución. Además, una vez más, el flamante coordinador general avisó de que Pedro Antonio Sánchez, el actual presidente de Murcia, sigue contando con el aval de Génova pese a su imputación en el caso Auditorio.
En este contexto, Rajoy abordó la salud del pacto con Ciudadanos en la habitual reunión del Comité de Dirección. Y, a pesar de las tensiones de los últimos días, se mostró bastante tranquilo. Según Maillo, existe una comunicación "permanente" con el partido naranja, aunque no aclaró la última vez que despacharon sus principales líderes. Y, en líneas generales, el PP sacó pecho de estar cumpliendo lo firmado en el acuerdo de investidura. "Eran lentejas, no había otra opción", rememoró en rueda de prensa, toda vez él fue clave en las negociaciones del pasado verano. "Tenemos actitud de diálogo" y "el nuestro es un partido serio que cumple lo acordado", afirmó.
A partir de ahí, el nuevo hombre fuerte de Génova empezó con los matices. Y no son pocos ni de menor importancia. En síntesis, afirmó que el PP quiere cumplir su palabra, pero que no será fácil y no depende solo de las formaciones firmantes. "Éramos conscientes de que muchas de las cuestiones del documento de Ciudadanos requiere de reformas legislaturas", apuntó en varias ocasiones. Y si accedió Rajoy insistió, fue porque "eran lentejas". "Esas reformas, incluso constitucionales, obligan al acuerdo", expuso, en relación al Partido Socialista y al resto de fuerzas políticas. Así se lo dirá Rafael Hernando a Juan Carlos Girauta este martes por la tarde.
Maillo se centró en dos cuestiones. Sobre la limitación de mandatos, precisó que todavía no tienen una "posición legal" al respecto aunque enfatizó que tal extremo solo se da en los regímenes presidencialistas. El propio Rajoy ya se pronunció en términos muy claros sobre esta cuestión: "Angela Merkel va a optar este año por un cuarto mandato y nadie cuestiona su carácter democrático o el funcionamiento de las instituciones en Alemania. Tony Blair gobernó 10 años. Y Herlmult Kohl, 18. Creo que la limitación de mandatos es propia de sistemas presidencialistas y no de los representativos, como es el nuestro", arguyó en una reciente entrevista en La Razón.
Además, un día más, el PP advirtió de que no ve motivos todavía para que Sánchez deje la presidencia de Murcia. Más al contrario, Maillo se acogió a los estatutos de la formación -que apuntan al juicio oral para apartar a un cargo político- y consideró "lógico" que sea el candidato a presidir la formación a nivel regional los próximos cuatro años. "El caso de Pedro Antonio no afecta, en teoría, a nuestro acuerdo nacional con Ciudadanos", dijo. Y le defendió: "No se le acusa de meter la mano" y "es evidente que existe una persecución política del PSOE".
La postura de Ciudadanos
Por su parte, Ciudadanos se mantuvo en sus trece y confió en que en esta legislatura se pueda llevar a cabo la supresión del aforamiento a diputados, senadores y miembros del Gobierno, así como el establecimiento de la limitación de mandatos al jefe del Ejecutivo. También en que, esta misma semana, cuando vence el plazo de tres meses para llevar a cabo las seis iniciativas de regeneración que Rivera puso como condición para empezar a negociar el pasado agosto, el PP se retrate registrando en el Congreso una petición de Comisión de Investigación sobre su propia financiación.
Durante su habitual rueda de prensa de los lunes, tras la reunión de la Ejecutiva naranja, la portavoz nacional del partido centrista, Inés Arrimadas, aseguró que el compromiso incluido en el pacto con el PP está cumplido: "Nosotros tenemos conocimiento de los tramites parlamentarios, y sabemos que medidas que incluyen una reforma constitucional no se pueden hacer en tres meses. Lo que sí que se puede, y se debe, que es lo que hemos hecho, es tramitarlas en los primeros tres meses. Por lo tanto, nuestra palabra está cumplida", afirmó.
En cuanto a la crisis en Murcia, a la espera del encuentro que el presidente Sánchez mantendrá con el líder regional de Ciudadanos, Miguel Sánchez, el próximo jueves, Arrimadas reiteró una y otra vez que "el imputado es del PP, no nuestro" y llegó a decir que no concedía "ningún plazo" para la dimisión pedida del presidente murciano. "Esa pregunta es más adecuada para el señor Sánchez: ¿Cuándo piensa él cumplir con su palabra, cumplir con la Ley, cumplir con el acuerdo y, además, hacer caso a sus compañeros de partido?" se interrogaba retóricamente la portavoz naranja, haciendo referencia velada a algunas voces populares que, como la del expresidente de la comunidad, Alberto Garre, han pedido también la renuncia del actual jefe del Ejecutivo autonómico.