Alejandro Fernández, portavoz del PP en el parlamento catalán ha defendido este miércoles en Es la Mañana de Federico, de esRadio, la actuación del gobierno del PP con respecto al separatismo en Cataluña. Para Fernández "el proceso en Cataluña está agonizando" porque "la situación ha cambiado" y ahora "sólo una tercera parte del 40% que se declara independentista en Cataluña cree que la independencia es posible", por eso, "ahora se abre una nueva etapa, que es una etapa de diálogo entre comunidades autónomas". Un proceso que llega después de cuatro años "muy duros y muy difíciles" con un proceso separatista "muy difícil de gestionar", advertía Fernández.
Respecto a los desafíos de este martes, día de la Constitución, puestos en marcha por concejales y alcaldes separatistas y de la CUP en distintos municipios de Cataluña, Fernández ha dicho que "la mayoría de los casos iban a provocar" y se ha mostrado convencido de que el delegado del Gobierno, Enric Millo, "va a explicar hoy caso por caso lo que ha ocurrido y las acciones que se van a tomar". Entre ellas, destaca la del concejal que quemó un ejemplar de la Constitución. Según ha dicho "yo no puedo denunciar nada, pero la persona que queme una Constitución asumirá las consecuencias, no le quepa la menor duda".
Para Fernández, la actitud de Enric Millo, actual delegado del Gobierno en Cataluña, frente a los desafíos de la CUP en el día de la Constitución, "no creo que se pueda definir como restar importancia" e insistía en que Millo "va a explicar caso por caso lo que ha ocurrido y las acciones que se van a tomar." En esta valoración tendrá relevancia los recursos públicos que hayan movilizado los ayuntamientos que han decidido abrir en este festivo tan señalado. Y ha minimizado el hecho de que algunos políticos acudieran a trabajar a su despacho: "Todos hemos trabajado en un domingo".
Respecto a la gestión por parte del PP nacional del proceso separatista en Cataluña, Fernández cree que "han sido cuatro años muy duros" y difíciles de gestionar por parte del Ejecutivo de Rajoy. En este sentido ha llegado a decir, dirigiéndose a los tertulianos que estaban en Es la Mañana, "con todos mis respetos, ya me hubiera gustado a mí haber visto a más de uno gestionando" un desafío como el separatista catalán.
Por otro lado, ha destacado la urgencia en plantear una alternativa ideológica en Cataluña, donde "nunca ha existido esa alternancia, ya que siempre ha gobernado el nacionalismo". Ha sido entonces cuando ha admitido que "durante 30 años, quizá por ingenuidad o por pragmatismo, se le han permitido veleidades a los nacionalistas". Por este motivo, ahora "hay que resolver un conflicto político" para el que confiesa "mi total confianza en el Gobierno". El portavoz del PP ha añadido que "la labor del gobierno central es tener una relación fluida con todas las comunidades" ya que "todas tienen problemas de financiación e infraestructuras, no solo Cataluña".
Ante las críticas de que el PP tiene discursos distintos en Madrid o Cataluña ha dicho que "estamos coordinados". Sin embargo sí le atribuye "esta estrategia" a Ciudadanos del que dice que "han tomado una estrategia porque el lenguaje del nacionalismo es muy contagioso y a Inés Arrimadas se le están contagiando algunas expresiones". De las declaraciones de Arrimadas sobre que apoyaría "un referéndum con todas las de la ley" ha dicho que "lo que tiene que hacer es aceptar que se ha equivocado y pedir disculpas".
En cuanto a Cataluña, se ha declarado convencido de que "el proceso se está acabando". "Ahora se abre una etapa totalmente nueva", ha afirmado.