Tal y como estaba previsto el suplicatorio de Francesc Homs ha salido adelante. Se trata de la autorización que necesita el Tribunal Supremo para juzgarle al ser el diputado convergente aforado. La votación ha tenido lugar a última hora del martes con los votos a favor del PP, PSOE, Ciudadanos y con los votos en contra de Podemos, y los nacionalistas catalanes y vascos. El resultado final ha sido de 248 votos a favor, 91 en contra y ninguna abstención.
La votación se ha producido a puerta cerrada pero fuentes del interior del hemiciclo han informado a Libertad Digital que ninguno de los grupos que han votado a favor del suplicatorio -es decir, ni PP, ni PSOE ni Ciudadanos- han solicitado el turno de palabra para justificar su apoyo a que el diputado separatista sea juzgado en el Supremo.
Llegados a esta punto, el Tribunal Supremo tiene ahora potestad para poder investigar a Francesc Homs según establece la Constitución en su artículo 71, por su participación en la consulta ilegal de 2014 en la que se dedicó a telefonear casa por casa para incitar al voto el 9N.
A Homs se le acusa de dos supuestos delitos de desobediencia y prevaricación. La petición del Supremo excluye el delito de malversación de caudales públicos que también le imputaba el fiscal y, por lo tanto, cualquier pena de cárcel. Son los mismos delitos por los que la fiscalía ha solicitado hasta 10 años de inhabilitación para el expresidente Artur Mas y 9 años en el caso de sus consejeras, Irene Rigau y Joana Ortega. Recordamos que según los fiscales, Homs tuvo un comportamiento consciente e intencionado para garantizar que los preparativos de la consulta salieran adelante aún siendo conocedor de la suspensión anunciada días antes por el Tribunal Constitucional.
Antes, la payasada de los nacionalistas
La promesa de cambio de tono con Cataluña del Gobierno del Rajoy y el tono conciliador que este lunes escuchábamos por parte de la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría no parece haber convencido a los independentistas. A las 12 del mediodía, el presidente de la Generalidad, Carles Puigdemont; el vicepresidente y líder de ERC, Oriol Junqueras y el ex presidente Artur Mas cogían un AVE dirección a Madrid para encabezar una concentración política frente al Congreso.
Ha sido en un hotel de la capital y no en centro cultural Blanquerna que los separatistas han convertido en su "embajada" en Madrid. Con ellos han estado diputados y senadores de Podemos, EN Comú Podem, En Marea, Compromís, PNV y Bildu. Todos ellos votarán en contra de que el Supremo finalmente se haga con la causa del diputado de la todavía convergencia, Francesc Homs por su participación en la consulta ilegal del 9N. El primero en intervenir ha sido el expresidente Artur Mas que también irá a juicio por delitos de desobediencia y prevaricación.
Ha dicho el también líder de la nueva CDC que " el suplicatorio y el juicio a Homs son un sinsentido y una vergüenza para España entera". Para Mas, al que fuera su consejero durante su mandato como presidente de la Generalidad se le "juzga únicamente por defender la esencia de la democracia". Junto al ahora presidente catalán Carles Puigdemont han advertido que la votación que este martes iba a tener lugar en el Congreso dificultará el diálogo que la vicepresidenta se empeña en mantener con los separatistas.
"Hoy se escribe la página más vergonzante del parlamentarismo español" ha dicho Puigdemont que añadía que " el PP, PSOE y Ciudadanos llenarán de más piedras la maleta del diálogo e irán en la dirección contraria a lo que es necesario". Acto de apoyo de la plana mayor del independentismo al diputado de CDC al que sin embargo no ha querido asistir la presidenta del Parlamento catalán Carme Forcadell precisamente el mismo día en que el TSJC la ha citado a declarar por desobediencia al Tribunal Constitucional el próximo 16 de diciembre.